Chiclana Natural realiza obras para una mejor distribución del agua potable

El Ayuntamiento de Chiclana, a través de Chiclana Natural, está a punto de culminar un conjunto de actuaciones por toda la ciudad, relacionado con la regulación de la red de agua potable, que ha supuesto una inversión de algo más de 300.000 euros.

En concreto y según ha explicado el delegado de Medio Ambiente y vicepresidente de esta entidad municipal, Roberto Palmero, los trabajos han consistido en más de siete obras, que han abarcado diferentes puntos de la población y que se han desarrollado durante el último mes y medio. Estas, que se encuentran al 95% de ejecución, han tenido como objeto “mejorar la regulación, con el fin de lograr una distribución más justa del agua, a la vez que poder controlar el tema de la presión”, declaró el responsable del área a este periódico.

Al mismo tiempo, también servirán para que Chiclana “esté preparada para adoptar las medidas que pueden llegar como consecuencia de la aplicación del Plan de Sequía”, añadió.

El responsable de Medio Ambiente también quiso destacar que, actualmente, desde Chiclana Natural, se están planificando nuevas intervenciones, que afectan a pequeñas incidencias que se han detectado, pero “en principio, la más importante está prácticamente terminada y en funcionamiento”, concluyó el edil.

Estas obras forman parte del paquete de medidas puesto en marcha por el Consistorio chiclanero, debido a la declaración de ‘excepcional sequía’, realizada por la Consejería Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, que obligaba a la localidad, como miembro del Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana, a reducir un 20 por ciento el gasto de agua.

Para ello, se procedió, además, a la disminución de la presión en las redes de suministro, salvo en los tramos de 6.00 a 8.30 horas y de 20.30 a 00.00 horas y a la prohibición del uso de agua para el consumo humano en casos de riego de jardines, praderas, árboles, zonas verdes y deportivas, de carácter público o privado; baldeo de viales, calles y aceras, de carácter público o privado; llenado de piscinas, estanques y fuentes, públicas o privadas, que no tengan un sistema de recuperación o circuito cerrado; así como fuentes para consumo humano que no dispongan de elementos automáticos de cierre.