La Guardia Civil rescata en Chiclana ocho animales de una perrera ilegal
El Seprona de Cádiz ya actuó en esta misma finca en febrero de 2017 cuando se rescataron a otros cincuenta animales que se encontraban en pésimas condiciones
Obras en la autovía A-48 a su paso por Chiclana
La Guardia Civil de Cádiz ha rescatado ocho animales de una perrera ilegal ubicada en Chiclana, donde su propietario los hacinaba sin agua, alimentación adecuada y las más elementales condiciones de habitabilidad. Tras la intervención del Seprona, los 6 perros y 2 yeguas han quedado bajo el cuidado de distintas protectoras de animales locales. El Seprona de Cádiz ya actuó en esta misma finca en febrero de 2017 cuando se rescataron a otros cincuenta animales que se encontraban en pésimas condiciones.
La actuación del Seprona de Chiclana se desarrolló a requerimiento de la Fiscalía de Medio Ambiente, después de que se presentaran diversas denuncias por un posible caso de maltrato animal que se estaría produciendo en una finca del municipio. Se da la circunstancia que la Guardia Civil ya actuó por hechos similares en febrero de 2017, cuando los agentes rescataron a otros cincuenta animales que se encontraban en pésimas condiciones. En estos días además se celebra el jucio contra el encargado del centro en 2017, quien actualmente se encuentra en paradero desconocido. Al propietario se le imputa un delito contra la flora, la fauna y los animales domésticos y 6 infracciones a la Ley de Protección Animal y otra por la denegación de colaboración a la labor Inspectora de los Agentes de la Autoridad.
Los guardias civiles del Seprona trataron en numerosas ocasiones identificar y localizar al propietario de la finca en cuestión, teniendo la certeza de que el investigado evitaba de manera intencionada la labor inspectora de los agentes, pudiendo comprobar desde el exterior de la misma el lamentable estado de los animales que allí se encontraban.
Tras realizar distintos apostaderos y servicios, pudieron localizar al propietario de la finca, poniendo todo tipo de impedimentos para que el Seprona pudiera realizar su trabajo. Lo que los guardias civiles se encontraron cuando entraron en la finca, era un escenario desolador ya que los animales se encontraban sin el más mínimo aseo, sin agua, sin alimentos y en un estado de delgadez tal que se hizo indispensable que los guardias civiles buscaran de manera inmediata alimentos para los canes y los équidos.
Tras la intervención realizada, con la asistencia de Veterinarios de la Oficina Comarcal Agraria, OCA y de la Veterinaria municipal de Salud, los animales quedaron depositados en varias Asociaciones de Protección Animal Autorizadas, y a disposición de la Fiscalía de Medio Ambiente, habiendo solicitado el Seprona para esta persona la incompatibilidad para la tenencia de cualquier tipo de animal, todo ello sin perjuicio de las actuaciones penales y administrativas que se han iniciado contra él.
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