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El Museo de Chiclana acoge una nueva ‘Pieza Invitada’ con motivo del Día Internacional de los Archivos

Ana González y Susana Rivas presentan un documento que muestra la relevancia del Corpus Christi en la sociedad del siglo XVIII

La exposición de estos documentos tiene el propósito de visibilizar la importancia que tienen los archivos en la sociedad actual

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Documentos de la nueva ‘Pieza Invitada’ con motivo del Día Internacional de los Archivos / D.C.

El Museo de Chiclana acoge una nueva ‘Pieza Invitada’ con motivo del Día Internacional de los Archivos. En este sentido, la primera teniente de alcalde, Ana González, y la delegada municipal de Cultura, Susana Rivas, así como el archivero municipal, Diego Vidal, han asistido a la presentación de esta obra, que conmemora dicha efemérides. Se trata de un documento que muestra la relevancia del Corpus Christi dentro de la sociedad del siglo XVIII, la exhibición de la hostia consagrada y las actividades que se llevaban a cabo y de cómo participaba el pueblo de ellas.

“Es importante subrayar el papel que tienen los archivos como guardianes de derechos y libertades, por lo que invito a todas las personas que tienen cierta curiosidad por nuestra historia a visitar el Archivo Municipal. Además, también son guardianes de la memoria colectiva de nuestra ciudad”, ha comentado Ana González, quien ha resaltado que “en el siglo XVIII la fiesta del Corpus tenía más importancia que la Semana Santa”.

Por su parte, Diego Vidal ha incidido en “la importancia de los archivos, teniendo en nuestras instalaciones documentos muy importantes desde 1560 hasta la actualidad”. “Así, hemos querido hacer un homenaje al Día Internacional con este documento del Corpus porque aparecen dos personajes muy curiosos como los papahuevos (cabezuelos) y los vejigueros”, ha comentado el archivero municipal.

Datado en 1732, forma parte del expediente relativo a los gastos generados durante la citada fiesta, y en él se relacionan los conceptos y la cantidad de dinero que se empleó a cada fin. De esta manera, se puede leer en dicha descripción la compra de cera, de iluminarias, de juncias para decorar las calles o de las esteras que se pusieron en los pies de los bancos de la iglesia, por ejemplo. Así mismo, se adecentó la Casa Consistorial, ubicada entonces en la esquina de la Plaza Mayor con la actual calle del Arquillo del Reloj, edificio este que, por cierto, aún no estaba construido.

Lo que más llama la atención de este documento son los datos relativos al cortejo en sí, a la procesión del Corpus, a los elementos que la componían. Aunque era primordial la exposición de la custodia, destacan de manera específica en esas cuentas de gastos, los dos gigantes que se trajeron de Cádiz, así como los papahuevos, término casi perdido hoy que hace alusión a los cabezudos habituales en este tipo de desfiles que con sus bailes y mojigangas animaban a los espectadores. Los tamboriles y los danzantes aportarían esa música necesaria para aportar un carácter alegre y festivo.

La exposición de este documento en el Museo con motivo de esta singular efemérides tiene el propósito de visibilizar la importancia que tienen los archivos históricos en la sociedad actual. Los archivos no sólo son guardianes de derechos y libertades sino también de la memoria colectiva e individual, de la historia de los pueblos, de su identidad. En el Día Internacional de los Archivos se invita a toda la ciudadanía a conocer estas instituciones y hacer uso de ellas. En sus depósitos se custodia y conserva un patrimonio documental esencial para comprender qué somos y hacia dónde queremos ir.

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