Chiclana presenta una propuesta que une literatura y naturaleza

Las delegaciones de Medio Ambiente y Cultura del Ayuntamiento de Chiclana se dan la mano para poner en marcha el proyecto ‘Versos al aire. Un paseo entre letras y naturaleza’, una iniciativa que propone un recorrido por ocho lugares singulares del centro histórico de la ciudad que estará guiado por árboles, con la intención de poner de manifiesto la importancia que tiene para el municipio el cuidado del entorno. Además, estarán acompañados por banco-libros, donde quien realice este paseo encontrará impreso un poema o fragmento de un escritor o escritora andaluza vinculado a la naturaleza.

Este original recorrido, que los delegados de ambas áreas municipales, Roberto Palmero y Susana Rivas, presentaron este miércoles en la Plaza de Jesús Nazareno, representa una pequeña guía que sirve de muestra para poner en valor la gran riqueza natural y cultural que tienen Andalucía y Chiclana, en particular, y que nace con vocación de proyecto abierto.

Al respecto, Roberto Palmero comentó que “ya dimos algunas pinceladas de esta iniciativa en la pasada Feria de Libro, cuando presentamos dos de los banco-libros. Ahora, por fin, la damos a conocer, uniendo dos ámbitos tan importantes. ‘Versos al aire’ creo que representa muy bien los que queremos reflejar a través de este recorrido por ocho lugares singulares del centro de la ciudad”.

Asimismo, indicó que “esta ruta se convierte en un pequeño reclamo turístico, en el que la gente no solo va a conocer a autores y autoras de nuestra tierra, sino también leer sus libros a la sombra del árbol que los acompaña. Igualmente, enlaza directamente con el trabajo que estamos realizando desde la Delegación de Medio Ambiente de generar nuevos alcorques y zonas de sombra, espacios que pedimos que sean respetados y cuidados por la gente, porque estamos abiertos a seguir creciendo y a ampliar este recorrido si se hace buen eso de ellos”.

Susana Rivas, por su parte, se refirió a esta propuesta como “un ejemplo más del trabajo transversal que desarrollamos con la Delegación de Medio Ambiente, fomentando espacios naturales dentro la zona urbana en los que la gente pueda acercarse a la cultura. Sabemos que la naturaleza ha sido fuente de inspiración para muchas y muchos poetas, como Fernando Quiñones o nuestro apreciado Antonio García Gutiérrez, pero también de mujeres como María Zambrano o Carmen de Burgos, que tienen su sitio en el recorrido como integrantes de una generación como la del 27 en la que resaltaron más los hombres”.

El recorrido

Cada parada cuenta con un árbol de porte importante, un banco-libro, que tiene grabado un poema y una breve referencia biográfica al autor o autora en cuestión. Igualmente, está acompañado de una pequeña leyenda sobre su especie, el número que ocupa en el recorrido y un apunte sobre los otros siete lugares que debe buscar la persona que realiza el paseo. Así, a modo de juego y otorgando dinamismo a la ruta, no solo se abre la puerta a indagar sobre la riqueza medioambiental de Andalucía, sino que también se invita a leer a sus autores y autora.

El paseo comienza en la Plaza de Andalucía, donde un ejemplar de olivo acompaña al banco dedicado a Federico García Lorca, sobre el que se podrá leer su poema ‘Arbolé, arbolé’; la siguiente parada avanza hasta la Plaza de España, donde será protagonista un tamarix junto al banco-libro de María Zambrano y la composición ‘El agua ensimismada’. En la calle La Plaza se encuentra un almendro y la poesía ‘Como flor de almendro’, de Carmen de Burgos, mientras que, en el ecuador de este viaje entre árboles y letras, en la calle Constitución, junto al Ayuntamiento, espera un ciprés y un banco dedicado a Antonio Machado, que muestra el poema ‘A Juan Ramón Jiménez’.

Un nuevo alto en el camino se realiza en la Plaza Patiño, donde un chopo acompaña al banco de Antonio García Gutiérrez y los versos de ‘La fuente’, mientras que la sexta parada llega hasta la Plaza Mayor, donde el poema ‘Árboles hombres’, de Juan Ramón Jiménez, puede ser recitado a la sombra de un limonero. Enfilando la recta final, en la Plaza de Jesús Nazareno, son protagonistas una encina y el poema ‘Oda al cante’, de Fernando Quiñones, mientras que la última parada se ubica en la Plaza de Las 13 Rosas, a la entrada del parque de Santa Ana, donde un roble otorga sombra al banco de Pilar Paz Pasamar y la composición ‘Amantes en la orilla’.