El diseminado de Chiclana busca luz y agua
Chiclana
Diez grupos preparan planes especiales para llevar los servicios básicos a sus parcelas
Decenas de viviendas sin regularizar ya han obtenido los permisos a través del AFO
Vidas truncadas por el PGOU
Chiclana/La caída del PGOU de Chiclana supuso un varapalo para la ciudad, con la vuelta a la regulación urbanística de 1987 y la paralización de numerosos proyectos. Sin embargo, también supuso una ventana de oportunidades para cientos de viviendas sin licencia que podrán conseguir suministros básicos de luz, agua y alcantarillado.
Mientras el Ayuntamiento elabora el futuro Plan urbanístico, del que se esperan novedades en los próximos días, vecinos del diseminado están organizándose para acceder a las conexiones. Unas 1.300 parcelas sin licencia podrán aprovechar el mecanismo AFO (Asimilado Fuera de Ordenación), la vía más rápida para quienes tienen cerca las redes de suministro, que poco a poco está dando resultados.
Además, el resto de vecinos que no tienen cerca las tuberías a lo largo del extensísimo término municipal también están trabajando para llevar las conexiones a las partes más alejadas del centro, independientemente de los avances del Plan urbanístico local y basándose en lo que contempla la nueva ley autonómica, la Ley Lista.
“Con los anteriores planes generales pasamos por dos procedimientos de regularización. En el primero cada parcela pagaba unos 40.000 euros y en el segundo lo bajamos a 20.000. Hay quien con eso regularizó su vivienda, pero fue muy poca gente. En esta ocasión, el mecanismo AFO no regulariza la vivienda, pero permite obtener servicios básicos por menos dinero”, explica la delegada municipal de Urbanismo, Ana González.
El mecanismo AFO es una solución individualizada –no requiere organización vecinal, lo que permite recortar tiempos- aplicable a aquellas viviendas que no tienen licencia y sobre las que han pasado seis años para una posible actuación de la administración. Si las redes de conexión pasan por esa parcela, el propietario podrá verse beneficiado por la vía rápida y acceder a las redes de luz, agua y alcantarillado.
El Ayuntamiento ha habilitado un sistema que permite a la ciudadanía saber si puede verse beneficiada. Se trata del pre AFO, con un coste de apenas 14 euros. Una vez recibido el informe favorable, el propietario solicita el AFO y, posteriormente, Chiclana Natural y Endesa le informarán de las obras a acometer en su parcela. De media, el coste en una casa 120 metros cuadrados asciende a los 8.000 euros: la mitad en la tasa y la mitad en acometidas de saneamiento y abastecimiento.
Urbanismo ha recibido casi 300 solicitudes que poco a poco van recibiendo el visto bueno. Más de un centenar han recibido un informe favorable y casi 50 parcelas están ya en la última fase, lo que supone que sus propietarios ya pueden acudir a Chiclana Natural y Endesa a contratar el suministro. El Ayuntamiento cree que la puesta en funcionamiento en zonas muy beneficiadas como la Rana Verde provocará un efecto contagio y animará a las más de 700 parcelas que aún no han presentado la solicitud.
“Por fin, se abre la posibilidad de tener servicios básicos. Es la cuestión en la que siempre hemos estado trabajando”, explica Joaquín Albaceta, representante de la Federación del Extrarradio de Chiclana, que se muestra satisfecha con los últimos avances en el diseminado. Recientemente, el Ayuntamiento instaló una tubería de agua en el camino de Nazaret, lo que posibilitará el acceso al agua a través del mecanismo AFO a 100 parcelas más. Además, se ha instalado la red de aguas fecales en las calles Aguacate, Fresno y Alerce, beneficiando a otras 80 viviendas.
En cualquier caso, sólo una parte del diseminado podrá beneficiarse del mecanismo AFO, la vía más rápida para conseguir servicios básicos. Otras zonas del extrarradio donde no llega la red de suministro ya han empezado a organizarse para poner en marcha la alternativa planteada en la Ley Lista para tener luz, agua y alcantarillado: los planes especiales.
“Si no tienes tubos que pasan por tu puerta necesitas esos planes especiales”, resume la concejala de Urbanismo, Ana González. Según apuntan los representantes vecinales, hasta diez grupos trabajan con el Ayuntamiento para poner en marcha esta fórmula, un procedimiento necesario para llevar las tuberías a estas viviendas sin regular y construidas en lo que la legislación actual considera suelos rústicos. Se trata de colectivos de entre 30 y 50 vecinos en zonas como Rueda La Bota o Marquesado, entre otras.
Con estos planes los vecinos no conseguirían una regularización de sus viviendas, sino llevar los suministros básicos que de momento no pasan por su parcela con obras costeadas de su bolsillo. El procedimiento implica delimitar el ámbito, elaborar un plan que justifique la solución ambiental que aportaría a la zona, esperar el visto bueno de la Junta de Andalucía –unos 18 meses- y desarrollar el proyecto llevando las redes de agua, luz o alcantarillado a la zona. La ley contempla que, en un plazo de cinco años, el Ayuntamiento fraccione esos costes mediante contribuciones especiales, por lo que la mayor parte de la inversión correría a cargo de los vecinos beneficiados.
“No hay otra. La ley deja muy claro que lo tienen que pagar los particulares. Si fuéramos con contribuciones especiales, el Ayuntamiento puede poner hasta un 10%”, apunta Ana González. Con la nueva legislación, la mayor parte del diseminado deberá optar por esta vía. El éxito de estos planes se antoja fundamental en un contexto de sequía y crisis climática, ya que permitiría cerrar u homologar fosas sépticas sin control y acabar con los pozos, cada vez más secos, conectando las parcelas a la red de agua.
También te puede interesar