Un estudio revela que La Barrosa apenas pierde arena, aunque cambia su perfil
El alcalde de Chiclana presenta este informe, realizado anualmente desde el año 2020
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El alcalde de Chiclana, José María Román, presentó ayer un estudio topográfico de la evolución de la arena en la playa de La Barrosa entre los años 2020 y 2024, que el Ayuntamiento ha encargado a la empresa Topgea, en un acto en el que estuvo acompañado por la responsable del área, Ana González, y el representante de la firma autora del trabajo, Pedro Pablo Gutiérrez.
En dicho informe, en el que se refleja la comparativa año a año y la situación en marzo (tras los temporales de Semana Santa) y julio de 2024 ,se indica que la playa apenas ha sufrido una pérdida mínima de arena, aunque sí ha habido cambios en cuanto a su distribución a lo largo del litoral.
De esta manera, se ha acumulado más arena en las dunas terrestres y en el agua, a unos 200 metros de la marea baja, perdiendo altura en las zonaa de arena seca y húmeda, provocando un mayor desnivel y la formación de lagunas durante la época de mareas vivas. “Se trata de un asunto muy importante para nuestro municipio", manifestó el alcalde, quien recordó que, “tras la importante regeneración de arena llevada a cabo por parte de la Demarcación de Costas, hemos realizado estos estudios anuales para analizar la dinámica del litoral, que va cambiando en función de los temporales, los vientos y las mareas”.
Así, explicó el regidor municipal, “contamos con las cubicaciones anuales y en estos últimos cuatro años apenas se ha perdido 1.817 metros cúbicos de arena, una cantidad irrelevante”. Sin embargo, detalló “el perfil es distinto, con un mayor desnivel, lo que ha provocado que se hayan formado lagunas en la arena seca durante las mareas vivas de este verano”.
Como novedad, en este 2024, se ha llevado a cabo un estudio a la barimetría en la playa sumergida, hasta los 200 metros desde la bajamar. “Parecía que había una cierta acumulación de arena y, efectivamente se, ha creado una duna sumergida muy próxima al litoral, frente a la plaza de Las Banderas, que ha acumulado unos 70.000 metros cúbicos de arena”, apuntó el alcalde, quien agradeció a Topgea el trabajo realizado durante estos últimos cuatro años.
El Ayuntamiento tiene previsto trasladar esta documentación a la Jefatura de la Demarcación de Costas, “para que pueda tener datos técnicos de cómo ha evolucionado nuestra playa, que mantiene prácticamente la misma cantidad de arena, aunque con distinto perfil”, comentó el regidor chiclanero, quien especificó que “el viento de Levante la retira de las dunas hacia la playa seca y la playa húmeda. Sin embargo, la ausencia de este ha provocado la acumulación de arena en las dunas terrestres, que incluso ha llevado consigo que las pasarelas se hayan aterrado, mientras que en la playa ha bajado su altura”.
Por su parte, Pedro Pablo Gutiérrez indicó que “hemos podido comprobar cómo en el interior del agua había una segunda duna en el mes de marzo, que ha desaparecido en julio, acumulándose en la playa”.
En cuanto a las dunas terrestres, “estas han acumulado mucho volumen y, por eso, es fundamental el viento de Levante, ya que contribuye a tener un perfil de playa menos erosivo y con una pendiente constante, evitando las grandes lagunas”, concluyó el responsable de la empresa de topografía.
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