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Esta mañana, en la sede del Club Náutico de Gallineras, sita en San Fernando, se celebró un encuentro entre los representantes de los clubes náuticos de Gallineras, Caño Chanarro y Sancti Petri, y diversas Administraciones Públicas, para tratar la creciente preocupación por las recientes sanciones impuestas por la Capitanía Marítima de Cádiz a los propietarios de embarcaciones fondeadas en el caño Sancti Petri.
A la reunión asistieron delegados provinciales de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, el director del Parque Natural Bahía de Cádiz y un representante de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía (APPA). Además, se informó sobre la intención de invitar a Capitanía Marítima en un próximo encuentro, ya que ni el Capitán Marítimo ni ningún representante de la institución estuvieron presentes en esta ocasión.
El principal tema abordado fue el descontento generado por las sanciones impuestas a los usuarios del caño. Según los clubes náuticos, estas multas, consideradas de elevada cuantía, han sido aplicadas de forma arbitraria, sin tener en cuenta la participación activa y colaborativa que han mantenido históricamente con las administraciones en los procesos de regulación.
“Estamos participando en el proceso de regularización y ofreciendo soluciones, pero se nos multa, dificultando una colaboración que consideramos esencial”, señalaron los presidentes de los clubes. Asimismo, denunciaron la falta de criterios claros en la selección de las embarcaciones sancionadas, destacando que algunas en evidente deterioro o peligro no fueron incluidas en las inspecciones.
Durante el encuentro, se cuestionó la falta de actuación de la Capitanía Marítima en la gestión del caño Sancti Petri durante décadas. Según los clubes, esta institución no ha cumplido con su responsabilidad en materia de seguridad y navegabilidad, a pesar de los esfuerzos de los clubes para mantener un uso controlado del espacio.
Por su parte, el director del Parque Natural Bahía de Cádiz aclaró que algunos expedientes sancionadores, gestionados por su entidad por imperativo legal, han sido de menor cuantía y ya se han resuelto en su mayoría. Sin embargo, lamentó que no tengan información concreta sobre las sanciones iniciadas por Capitanía Marítima.
Para resolver la situación, los clubes náuticos propusieron trabajar en un plan de regularización de los fondeos en el caño Sancti Petri. Entre las medidas planteadas se incluyó la creación de más atraques o campos de fondeo, contando con el apoyo técnico de la APPA. Además, solicitaron la suspensión temporal de las sanciones mientras se desarrolla un marco regulatorio consensuado, argumentando que las multas actuales comprometen la viabilidad económica de los clubes, sus trabajadores y la economía local.
Los representantes de las administraciones presentes manifestaron su disposición a dialogar y a buscar soluciones conjuntas, viables y realistas. Los clubes, por su parte, reafirmaron su voluntad de colaborar, aunque advirtieron que, si las sanciones persisten y no se alcanzan acuerdos satisfactorios, tomarán otras medidas para defender los derechos de sus socios y asegurar la continuidad de sus actividades. “El caño Sancti Petri ha funcionado durante más de 50 años gracias a nuestro esfuerzo, sin causar problemas y garantizando un uso controlado del espacio. Seguiremos luchando por su futuro”, concluyeron los representantes de los clubes.
La reunión dejó en el aire la necesidad de una solución que armonice la preservación del entorno natural con el desarrollo sostenible de las actividades náuticas en la zona.
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