Las variadas alegaciones al Plan de Ordenación Urbana de Chiclana

El pasado jueves finalizaba el plazo para la presentación de alegaciones al Plan de Ordenación Urbana (POU), el documento que se refiere al desarrollo futuro del suelo urbano de Chiclana y que se espera que esté aprobado de forma definitiva este verano, según apuntó el alcalde, José María Román.

La ciudad salva de esta forma un nuevo trámite, al que se presentaron unas 350 alegaciones, procedentes de partidos políticos, entidades y ciudadanía en general, una cantidad que puede considerarse un tanto escasa, teniendo en cuenta que se está hablando de un municipio con unos 90.000 habitantes.

PP, VOX y Toniza son algunas de las entidades que han informado sobre sus aportaciones.

Partido Popular

El Partido Popular ha registrado cuatro alegaciones al POU, que llevan por título: Integración de vacíos urbanos y su reconocimiento como suelo urbano, La necesidad de responder a la demanda efectiva de vivienda y promoción del acceso a una vivienda digna, la promoción del empleo. Usos terciarios e implicación del comercio y la industria y Participación ciudadana.

Todas ellas se deben “a peticiones de asociaciones de vecinos, colectivos sociales y residentes, con el objetivo de mejorar el documento”, reveló en una rueda de prensa, su portavoz municipal, Ascen Hita, quien señaló que abordaban “aspectos como la inclusión de espacios que históricamente han sido urbanos o están parcialmente urbanizados, evitando que zonas con infraestructuras y viviendas queden fuera del planeamiento”.

Asimismo, contempla medidas para “facilitar el acceso a la vivienda a los jóvenes y a las familias con menos recursos” y “de apoyo al comercio y la industria local”. Como consecuencia de ello, el PP se opone a lo que entiende como “restricciones injustificadas en zonas estratégicas como El Torno y la Avenida del Mueble”. Y exige “que se agilicen las licencias comerciales, reduciendo su tramitación a un plazo máximo de tres meses”. También defiende la actualización del suelo industrial y comercial, y demanda “una revisión de los polígonos industriales”, a la vez que cuestiona que “se mantengan usos industriales obsoletos en el centro, en lugar de impulsar el residencial en estas áreas”.

Al igual que mostró su preocupación por la “exigua implicación de los chiclaneros en la elaboración del POU”.

VOX

VOX presentó un total de seis alegaciones, tituladas: Reducción del número de zonas, Justificación de la competencia de la Junta de Gobierno Local para aprobar el Plan, Integración en la malla urbana de las zonas limítrofes que en un futuro próximo puedan incorporarse al planeamiento, Mejora de infraestructuras, Movilidad, Limitación de las Viviendas de Uso Turístico (VUT) y Formulación proyectos de largo alcance.

Su portavoz, Manuel Vela, en rueda de prensa, manifestaba que “no es la herramienta que la ciudad necesita para regular su urbanismo”. Además, lamentó que “el equipo de gobierno plantee cuestiones vacías de contenido, abrazando para ello excusas como la perspectiva de género o el cambio climático y priorizándolas ante el acceso a una vivienda asequible o la preservación del patrimonio histórico”.

Y considera que “lo que urge es dar solución a unas infraestructuras de conducciones obsoletas, que afectan casi a la mitad de la población, a un alumbrado público insuficiente, a aquellos suelos afectados por la nulidad de planeamiento y trabajar para incorporar las 6.000 viviendas que el POU plantea como necesarias para los próximos años”. También defiende “solucionar unas pérdidas de agua de la red, que superan el 22% del total del caudal”.

Respecto a la movilidad, no entiende que el documento “nos invite a repensar la ciudad priorizando la escala de caminar”. Para asegurar que “el clima y la filosofía de vida hacen incompatible el uso de la bicicleta como medio de transporte, más allá del ocio o el deporte”. Sobre las limitaciones de velocidad, Vela declara que “supone un auténtico calvario para los conductores y contribuye a secuestrar la propia movilidad”.

Tampoco comparte VOX la visión del POU acerca de las viviendas de uso turístico. “Limitarlas no ayudaría ni de lejos a desestacionalizar el turismo ni a remediar esta situación”, dijo el portavoz. También, calificó algunos proyectos como “innecesarios y de postureo”.

Toniza

Por otro lado, de estas tres entidades, Toniza-Ecologistas en Acción Chiclana es la que más capítulos ha aportado.

En total, han sido dieciséis para veinte alegaciones: Marco jurídico, Licencia urbanística vs licencia ambiental para la tala, Masa arbórea o arbolada, Catálogo de árboles y arboledas de interés local, valoración económica para la protección de las masas arbóreas, Pinar de Costa Sancti Petri, La biodiversidad, Campo de fútbol y nuevo cuartel de la guardia civil en la caseta municipal, Hospital municipal en la longuera, Defensa contra tsunamis y la previsible subida del nivel del mar, La promoción del uso del transporte público. El tren ligero, Reutilización de aguas grises e Instalación de paneles fotovoltaicos en aparcamientos, Presencia de flora protegida (narcisos de floración otoñal) en parcela para aparcamiento (Sancti Petri) y para hotel (Loma del Puerco) y Protección de los murales de Antoni Gabarre en el poblado de Sancti Petri y otras zonas de Chiclana.

De estas, la que ha suscitado mayor interés y también ha enzarzado a esta organización en una discusión con el delegado de Urbanismo, Rodolfo Pérez, es la que se refiere a la recalificación del suelo del Pinar de Costa Sancti Petri, permitiendo con ello “la construcción de 206 chalés de lujo, en unos 60.000 m², dejando tan sólo 3.598 m² de zona verde, es decir, el 6,3 % de toda la masa boscosa”, advierte la asociación. Y esto se proyecta, a pesar de que “el propio Estudio Ambiental Estratégico del POU señala que “la ordenación, en este ámbito, carece de sensibilidad ambiental”, apostilla.

Toniza defiende, en primer lugar, que el Ayuntamiento realice gestiones para “acceder a fondos específicos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España para adquirir espacios valiosos del litoral de interés para toda la ciudadanía”.

No obstante, reconoce que “todo parece indicar que habrá que sacrificar una parte de esta apreciada masa boscosa”. Por ese motivo, declara que, “asumiendo el impacto que representa ordenar verticalmente los aprovechamientos urbanísticos, alegamos que siga siendo una parcela hotelera con la consiguiente generación de empleo y riqueza”. Para ello, propone que “el edificio se ubique en el extremo menos arbolado, que ocupe la menor parte posible y que se eleve hasta cuatro alturas”.

De esta forma, la organización calcula “que se podrían salvar sobre 50.000 m² del Pinar de Costa Sancti Petri”.