Ecologistas y Ayuntamiento de Trebujena coinciden en desclasificar los terrenos de la macrourbanización

Miembros del grupo local Río Limpio-Ecologistas en Acción Trebujena y de la Federación Provincial de Ecologistas en Acción de Cádiz mantuvieron ayer una reunión con el alcalde, la teniente de alcalde y la delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Trebujena, para analizar las gestiones a llevar a cabo para desclasificar y proteger los terrenos en los que se pretendía la construcción de un macroproyecto turístico en 230 hectáreas de marismas, junto al río Guadalquivir y justo enfrente de Doñana.

Veinte años después de que empezaran las primeras movilizaciones contra esta barbarie, el gobierno local de Trebujena (IU), que sigue bajo las mismas siglas con las que se iniciara todo este despropósito, confirma la rectificación y se muestra dispuesto y decidido para que el macroproyecto no se lleve a cabo nunca.

En la reunión se ha coincidido en la necesidad de desclasificar los terrenos para que dejen de ser urbanizables y que en un futuro puedan ser recuperados como marismas. Se ha puesto en valor la necesidad de una figura de protección que preserve su ecosistema y blinde su biodiversidad. Para ello, se ha hablado de una serie de medidas que habría que adoptar, tanto desde el ayuntamiento como desde la Junta de Andalucía, para conseguir este objetivo. Los ecologistas y el ayuntamiento han mostrado su disposición en colaborar hasta la definitiva protección de estas marismas.

Impulsada por la misma formación política que está ahora en el ayuntamiento (Izquierda Unida), el proyecto de una macrourbanización en plena marisma surgió hace dos décadas a iniciativa de un empresario belga, Bernard Devos, que pretendría desarrollar un complejo con 300 casas, hotel y campo de golf en la zona. La empresa se comprometía a pagar varios millones por los terrrenos, una vez desclasificados, para lo que había que modificar el PGOU.

Finalmente, este año, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir emitía un informe vinculante desfavorable al proyecto debido a la inundabilidad de los terrenos -prácticamente, a cota 0- y por la falta de recursos hídricos.