Joaquín Benítez
Luces y sombras en navidad
cádiz c.f.
El Cádiz vive un presente plácido, siendo líder de su grupo en Segunda B, pero el pasado no se olvida. Por eso ha acudido a la justicia ordinaria para conseguir que se repare en parte la injusticia cometida por los diferentes comités en relación a la impugnación del partido contra el Hércules por la alineación indebida de Kiko Femenía. La demanda cadista se va a centrar en conseguir la nulidad de la resolución del Comité Español de Disciplina Deportiva (CEDD), que desestimó el recurso cadista allá por el 29 de agosto pasado.
El presidente de este órgano sigue siendo Liborio Hierro, que en su momento comentaba que no había seguido el caso del Cádiz con Competición y Apelación para no sentirse influido. Al final, según los acontecimientos que se produjeron, dio la impresión de la influencia sí existía. Previamente a fallar contra los intereses amarillos ya había anunciado que desestimaba las medidas cautelares solicitadas por el Cádiz por no haber lugar a la suspensión de las competiciones de Segunda A y Segunda B. Eso fue el 4 de agosto y el CEDD no se reunió hasta el día 29, viernes, un día antes de comenzaran todas las ligas.
Liborio Hierro atendía ayer a este periódico y se sinceraba sobre lo acontecido el pasado verano, después de conocer que el Cádiz acude a la vía ordinaria para encontrar una compensación. Inicialmente se mostraba remiso a hacer declaraciones, pero después quería aclarar algunos aspectos. En primer lugar, se mostraba dolido por lo que entendía que había sido un trato desconsiderado hacia su persona: "Se me ha insultado mucho públicamente desde Cádiz, tanto por parte del presidente del club como por su alcaldesa. Hablaban de prevaricación y eso es delito, pero no me voy a querellar. Llevo trabajando dentro de la justicia deportiva desde el año 93 y he vivido todo tipo de situaciones, pero ésta es insólita porque una cosa es no estar de acuerdo con el fallo de un comité y otra, que se llegue al insulto".
Le parece "respetable" que la resolución de su Comité sea objeto de recurso en el orden jurisdiccional contencioso-administrativo por parte del Cádiz y no entra a valorar esta decisión, pero cree que detrás de esta actuación se oculta algo: "Es un caso curioso porque ahora el presidente del Cádiz quiere buscar culpables a una mala gestión deportiva. Además, para ello cuenta con el apoyo coreográfico de la política local. Los triunfos hay que conseguirlos dentro del campo y no en los despachos poniendo excusas que no conducen a ningún sitio. Fueron tres los comités que coincidimos en desestimar su recurso y será por algo. Nosotros no tomamos decisiones arbitrarias, sino fundamentada en derecho".
Hierro dice que "desde Cádiz han hablado personas sin conocimientos jurídicos, ensuciando algo tan bonito como es el deporte, que debe servir como apoyo para la juventud. Lo del Cádiz es una chapuza, pero allá cada uno con lo que hace".
Preguntado acerca de por qué el CEDD no se reunió para estudiar la petición cadista hasta el último día hábil del mes de agosto responde que "los miembros que integramos el Comité no somos profesionales y en agosto la mayoría está de vacaciones. En ese mes no nos reunimos a no ser que sea un caso con carácter de urgencia. Además, tengo entendido que faltaban unas alegaciones y no podíamos tratar el caso a primeros de agosto".
Antonio Muñoz, presidente del Cádiz, se quedaba muy sorprendido al conocer anoche las declaraciones del máximo mandatario del CEDD. Quería hacer diferentes puntualizaciones y matizar algunos aspectos que considera decisivos en el caso.
En primer lugar, quiere aclarar que no ha habido insultos hacia Hierro: "En ningún momento hemos dicho que haya prevaricación por parte de este señor ni por nadie de los diferentes Comités. Lo único que decimos es que, en base a los fallos, se llega a la conclusión de que los miembros de Competición, Apelación y CEDD no conocen el reglamento actual. O toman decisiones con desconocimiento o lo hacen yendo en contra de la reglamentación vigente. Algo raro hay porque no es normal lo que nos ha pasado".
El dirigente cadista profundiza en su teoría añadiendo que "ningún Comité ha coincidido con los otros en sus fallos. Todos nos daban la razón, pero al final se inventaban algo que no se ajustaba ni a la lógica ni al sentido común y, sobre todo, que iba en contra de lo legislado. Estoy de acuerdo con el señor Hierro en que el deporte es muy bonito y que hay que ganar los partidos dentro del campo, pero a eso añado que por ser tan bonito no se puede permitir que haya equipos que no cumplan las normas federativas. Todos debemos cumplir las normas dentro del campo. Así sí será justo ganar o perder dentro del campo".
Muñoz no quiere pensar mal, pero no lo puede evitar con algunos hechos muy concretos que se dieron durante el mes de agosto, y muy concretamente en el caso del CEDD: "No es normal que se reúnan el día 29 y mucho menos que la reunión dure diez minutos. La resolución consta de 17 folios y se tarda bastante más de diez minutos en escribir eso, por lo que se llega a la conclusión de que la decisión estaba tomada desde antes".
El presidente amarillo no se pronuncia sobre algunas valoraciones realizadas por Hierro, pero hace hincapié en un aspecto de la resolución del CEDD con el que considera que se desacredita al jurista: "En el fallo de este Comité hay un error muy grande que no es propio de alguien que está cuidando por la justicia deportiva. Llegan a decir que no hay alineación indebida del jugador del Hércules porque tenía un visado de la LNFP. Primero, ya quedó demostrado por parte del Comité de Apelación de que este visado no tiene ningún valor, pero es que encima el CEDD asegura que la LNFP (Liga Nacional de Fútbol Profesional) es un órgano federativo. Eso no se puede consentir porque los Comités deben controlar al dedillo los asuntos que tratan y castigar a aquellos que incumplen las normas".
Sigue trayendo cola la alineación de Kiko Femenía y, con el paso del tiempo, se descubre que ni a la Federación ni a los Comités les gustó que por parte del Cádiz y de su Ayuntamiento se alzara la voz contra las decisiones que se tomaban en Madrid. El club cadista terminó en Segunda B y ahora reclama lo que considera justo en la justicia ordinaria, pero el poder establecido se ha quedado con las ganas de responder a lo que se ha dicho en Cádiz. Liborio Hierro ya lo ha hecho.
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