Nuevo título mundial para el gaditano Coello
Muay thai
Destrona por la vía rápida al japonés Kunitaka Fujiwara al abrirle una profunda brecha en la frente en el primer asalto.
Cádiz/El deportista gaditano Carlos Coello ha destronado a primera hora de la madrugada al japonés Kunitaka Fujiwara en el primer asalto de la pelea por el título mundial ISKA de muay thai del peso pluma que ambos han protagonizado en el pabellón Lydia Valentín de la localidad leonesa de Ponferrada.
Coello ha vencido por parada médica tras provocar una profunda brecha en la frente del asiático, que no ha podido saldar con éxito su tercera defensa de una corona que ha cedido a su adversario tras seis años en su poder.
En un primer asalto donde el japonés ha salido claramente con la intención de llevar el peso del combate, el gaditano lo ha contrarrestado con grandes acciones hasta que hacia la mitad del mismo ha impactado con un golpe endiablado de codo en el rostro de su rival, abriéndole una brecha al japonés que ha propiciado que el médico parara el combate inmediatamente para dar como ganador y nuevo campeón a Coello, que ya obtuvo hace un año el título mundial WKN.
Carlos Coello, cadista reconocido, se ha acordado del equipo de fútbol de sus amores en una celebración durante la cual portó encima del ring la bandera amarilla del club de su ciudad natal, lo que hace pensar que en breve recibirá de nuevo el reconocimiento del público del Ramón de Carranza con ocasión de un partido casero del conjunto entrenado por Álvaro Cervera.
En plena euforia después de conseguir la victoria, el gaditano ha confirmado que disputará una nueva pelea por el título mundial en Cádiz el próximo 23 de febrero.
Carlos Coello: "Ese golpe lo habíamos ensayado bastante y me salió de maravilla"
Carlos Coello continuaba más que contento por la tarde, unas 15 horas después de haber ganado de manera relampagueante la pelea que le sirvió para proclamarse campeón mundial por segunda vez a lo largo de su carrera profesional, ahora en la versión ISKA. Así explicaba lo ocurrido en un combate en el que casi ni sudó: "Ese golpe lo habíamos ensayado bastante durante la fase de preparación, pues Kunitaka va mucho con los puños y eso le obliga a acortar la distancia para acercarse al rival. Me salió de maravilla, impacté muy fuerte y enseguida me di cuenta de que se acababa la pelea porque vi el corte que le había hecho. Estoy muy contento, sobre todo por la entidad del adversario y porque ha dado fruto el trabajo hecho en el 7Muaythai de Tailandia y con Israel Palomeque en España".