Copa del Rey: El Chiclana-Osasuna se suspende y se jugará el martes 5 de noviembre

El mal estado del terreno de juego, debido a la lluvia, obliga a decidir el aplazamiento del partido

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Jugadores con paraguas sobre el terreno de juego chiclanero. / Jesús Marín
Cristóbal E. González / Chiclana

30 de octubre 2024 - 19:05

Chiclana y Atlético Osasuna se medirán el próximo martes, día 5 de noviembre, a las siete de la tarde, después de que el partido, correspondiente a la primera ronda de la Copa del Rey, previsto para este miércoles, fuese suspendido.

Las fuertes lluvias caídas en las horas previas comportaron que el césped del Municipal presentara un muy mal aspecto. Algunos minutos antes de las seis de la tarde (esto es, cuando faltaba más de una hora para que empezara el encuentro), el árbitro designado, el extremeño Francisco José Hernández Maeso, comprobaba que, en la mayor parte del campo, el balón no botaba y apenas corría unos centímetros. La decisión, por consiguiente, parecía clara. Jugadores de uno y otro equipo, en la zona de vestuarios, daban por hecho que el enfrentamiento se llevaría a cabo en otro momento, con claras muestras de aceptación, no en vano eran ellos quienes iban a asumir riesgos físicos importantes al disputar un encuentro en un campo en muy malas condiciones de partida y que, con el paso de los minutos, iba a hallarse en una peor situación.

A todo ello se sumaba la lógica de no disputar un encuentro de fútbol en una ciudad en alerta naranja y que ya había comenzado los tres días de luto oficial decretados por el Ayuntamiento por las tristísimas consecuencias de la DANA, una decisión que incluía la suspensión, por ejemplo, de las actividades previstas con motivo de Halloween. Si bien no había ningún riesgo de desbordamiento del Iro -cada vez que las precipitaciones son importantes el chiclanero mira a su río-, no estaban los ánimos para partidos de fútbol. Los aficionados, además, iban a acceder a un recinto que, más allá del mal estado del césped, no reunía unas condiciones aceptables para hacer cómoda la estancia en las gradas, con gran cantidad de agua acumulada que los Bomberos llevaban horas achicando.

No obstante, el colegiado, una vez comprobado que el balón no botaba, se introdujo en vestuarios y no fue hasta casi una hora después que comunicaba oficialmente la suspensión del choque. Durante ese tiempo había vuelto a llover con fuerza, unas precipitaciones que los cientos de aficionados que estaban fuera del Municipal, esperando la decisión, tuvieron que soportar. Inmediatamente después de que los clubs conocieron que el partido quedaba oficialmente suspendido, el Chiclana informó a través de megafonía de esta circunstancia. A los aficionados, muchos haciendo cola desde las cinco de la tarde, enfadados y mojados, no les quedó otra que volver a casa.

Juan Luis Rojo, presidente blanco, indicó que la suspensión era la decisión más acertada, teniendo en cuenta factores como el riesgo de lesión de los futbolistas o que el aficionado no iba a poder disfrutar del espectáculo.

Con mejor humor se lo tomó Luis Sabalza, presidente rojillo. “No pasa nada, volvemos la próxima semana, hoy no hemos podido ni ver la maravillosa playa que tiene Chiclana y de la que tanto nos han hablado. En Chiclana nos han tratado tan bien que no nos importa volver, por supuesto”. Los navarros habían llegado por la mañana a Chiclana y tenían previsto volver a Pamplona nada más acabar la contienda, un programa de viaje que repetirán el martes.

Rojo señaló que en las próximas horas comunicarían a través de los medios oficiales del club las opciones de los aficionados que habían adquirido su entrada para el choque ante los pamplonicas, esto es, su devolución o la válidez para la nueva fecha.

El Chiclana juega el domingo en liga

Antes del partido del martes, el Chiclana juega el domingo frente al Atlético Palma del Río (17:00 horas), un choque esencial para los blancos, que actualmente son segundos. Su contrincante le sigue en la tabla clasificatoria, a tan solo un punto. Los hombres de Cortijo, por consiguiente, tendrán únicamente algo más de 48 horas de descanso entre partido y partido. Desde el club blanco se ha dejado claro en numerosas ocasiones que el objetivo de la temporada es la competición liguera, conseguir, tras años intentándolo, el ascenso a Tercera. La Copa, como ocurriera el año pasado, se entiende como un premio y una fiesta. Las alineaciones de Cortijo se han caracterizado hasta el momento por la realización de no pocas rotaciones, una política deportiva que muy probablemente repita de domingo a martes.

Osasuna, por su parte, se mide el sábado al Valladolid (14:00 horas), tendrá un día más de descanso. La lógica, además, apunta a que Vicente Moreno alineará a los no titulares en Chiclana, aunque para el partido de este miércoles había desplazado a prácticamente toda la plantilla, incluidas sus grandes estrellas, Budimir y Bryan Zaragoza.

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