San Fernando
Michelle, la perrita abandonada que logró encontrar familia en unas horas

Un solitario gol hunde al Celta

FÚTBOL l Liga adelante

El Hércules agudiza la crisis viguesa y complica el futuro de Eusebio Sacristán

El celtiña López Garai corre para hacerse con el control del balón.
Efe / Vigo

27 de septiembre 2009 - 05:02

CELTA: Falcón, Hugo Mallo, Catalá, Jordi, Botelho, Bustos (Michu, 79'), Trashorras, Danilo, Dani Abalo (Saulo Rodrigues, 73'), Iago Aspas (López Garai, 46') y Arthuro. HÉRCULES: Calatayud, Juanra, Abraham Paz, Rodríguez, Peña, Rufete (Kiko, 85'), Farinós, Tiago Gomes (Jorge Alonso, 76'), Sendoa (Del Olmo, 73'), Tote y Delibasic. Árbitro: Lesma López (madrileño). Amonestó a Bustos, Botelho y López Garai por parte del Celta y a Tiago Gomes, Rufete, Rodríguez, Peña y Del Olmo por parte del Hércules. Gol: 0-1 (53') Abraham Paz. Incidencias: Encuentro de la quinta jornada disputado en el campo de Balaídos ante 6.478 espectadores, según fuentes del club.

El Hércules profundizó en la crisis de resultados del Celta y complica el futuro de su entrenador, Eusebio Sacristán, tras vencer por la mínima en Balaídos. El solitario tanto del central Paz hunde a los celestes, que siguen sin encontrar la fórmula para romper la sequía goleadora en la que entraron.

Desde el inicio del encuentro ambos equipos fueron a por la victoria. El Hércules fue el primero en avisar y los vigueses no tardaron en responder, pero los atacantes mantienen la pólvora mojada.

Con el paso de los minutos, el Hércules logró quitarle el balón al Celta y los de Eusebio empezaron a sufrir. La delantera gallega desapareció del partido y los celestes renunciaron al juego por la banda izquierda. Mientras, su rival, sin realizar nada del otro mundo, dio mucha más sensación de peligro.

Tras el paso por los vestuarios, Eusebio retiró del campo a Iago Aspas y metió a López Garai. El cambio le sentó bien al Celta. Los vigueses empezaron dominando y pudieron adelantarse en el marcador pero un minuto después de perdonarle la vida a su rival, el conjunto gallego encajó el primer tanto de la tarde tras un saque de esquina que Abraham Paz cabeceó al fondo de la red.

Los últimos minutos fueron un querer y no poder de un Celta que incluso pudo encajar más goles. Al final, tras la debacle, bronca monumental de los aficionados para el equipo y el cuerpo técnico, al que se le complica su futuro en el club gallego.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último