Color esperanza

El tipo. Guerreros de color verde con un trébol en las manos. las coplas. Una lucha por encontrar el bienestar y buscar la felicidad en la vida. La comparsa de Marbella, una habitual en la segunda fase del Concurso, vuelve al certamen con una idea fantasiosa que se acaba perdiendo. A esto se une que el grupo no termina de estar todo lo conjuntado posible al sonar en algunas piezas algo chillado. Tampoco acompaña demasiado el repertorio, por lo que la sensación final es un tanto agridulce. Esto se deja ver en la tanda de pasodobles, con una música que se alarga en exceso y una melodía que se pierde por la potencia del grupo y algunas imprecisiones a la hora de ejecutarla. La primera letra desconcierta en su desarrollo, en lo que parece ser una crítica contra las denuncias falsas de violencia machista, que se une a una historia en la que el suegro también le pega al hombre que cuenta su historia. Un enorme lío. Tampoco es que acompañe demasiado la segunda letra, en la que un emigrante andaluz cuenta todos los tópicos de Andalucía que echa de menos al irse de su tierra. Están muy verdes en los cuplés, en los que quieren que Donald Trump construya dos muros para que se quede en medio y Mariano Rajoy no pone a Soraya Sáenz de Santamaría de ministra de Defensa porque el país se quedaría con "las defensas bajas". La esperanza es lo último que se pierde.