Coro 'Las del puerto'

Cádiz/El coro de Barbate completa su vuelo en el Concurso en estas semifinales con un pase que solo sirve para cumplir con corrección con el premio de la tercera actuación. Tras haber conseguido el objetivo, las letras flaquean un poco en el intento de apurar la competición. Al menos, destaca de la primera copla el homenaje que le hacen al Loco de la Colina para destacar sus habilidades con los silencios y las miradas en las entrevistas. Denuncian que cuando “se le apagaron los focos” le volvieron la espalda y recuerdan su mítica frase “en Cádiz hay que mamar” como “palabra de pregonero” de la fiesta. Queda algo raro cerrar su participación en el Falla con una letra al tango, sus orígenes y cómo lo aprendieron, por lo que reconocen que ha quedado “en mi alma atrapado al descubrirlo el año pasado”. Al final, la letra se convierte en una excusa en su último verso para desearle “gloria eterna a Julio Pardo” tras fallecer el pasado sábado. Reguleras los dos cuplés. Le cantan a su tipo en el primero, por el que hay quien “suspira por un picotazo”. Algo concursero el segundo a los problemas por hacer letras bordes, aunque para hacerlos “ñoños” prefieren rematarlos como ‘Las musas’.

Actuación en cuartos

el tipo. Gaviotas. las coplas. Vuelo rasante del coro de Barbate en su pase de cuartos. Con una interpretación insegura en algunos momentos, sobre todo en los tangos, no terminan de pescar con su actuación, por lo que da un pequeño paso atrás respecto a lo ya mostrado. Con el cariño por el que vuelven a volar en Cádiz, al menos se muestran muy diferentes en la elección de los temas de los dos tangos, ambos con distinta intención. En el primero, apelan a la sensibilidad, correcta y en su justa medida, a los desvelos de una mujer que no puede quedarse embarazada y tiene que inseminarse frente a aquellos que no saben “el infierno” que vive cada vez que le preguntan cuándo va a buscar un niño. Más atinada la segunda letra dedicada a la exhumación de los restos de Queipo de Llano de la sevillana Basílica de la Macarena. Relatan la historia de una abuela que pide ir al altar una vez que se ha hecho justicia por no estar presente “aquel novio de la muerte”. Los cuplés pasan completamente desapercibidos al quejarse de la playa tan chica para tantas gaviotas que aparece en el cartel del Carnaval y decir que se van a dar un buen baile con un flamenco. En un Concurso en el que el desarrollo de las propuestas suele ser muy parecido, destaca el hilo que tiene el popurrí a partir del tipo.

Preliminares

El tipo: Gaviotas. Las coplas: El mar siempre está presente en Barbate, que le da vida y sentido. Si la fábrica de conservas cierra, las gaviotas sobrevuelan para rapiñar los desechos. El coro de Barbate confirma las buenas sensaciones de la pasada primavera con un repertorio que es la antítesis de los nuevos derroteros de la modalidad, primando el contenido y el desarrollo para llegar a la orilla. Aunque se descuelga un poco la presentación, sobre todo por las dudas en la interpretación y al vivir más del costumbrismo para desarrollar un tipo que se justifica en un cariño recibido que les hizo volar, alzan el vuelo en los tangos. Con una música muy alegre, muy rítmica –en algún pasaje algo atropellada en la ejecución– y bien estructurada, primero cumplen el trámite para mostrarla al comparar su pasado comparsista con su presente corista, una modalidad en la que no están de paso y por la que “bebo los vientos”. Bien rematada la segunda copla a las penurias pasadas por el colectivo LGTBI y el agradecimiento a Cádiz por dedicar una calle a la Petróleo y la Salvaora, “ejemplos para la historia”. Tocan tierra en los cuplés, con poco alimento, a cómo dejaron los atunes del pasado año y el coraje que nos da cuando se caga una gaviota en un coche recién lavado. El popurrí pasa volado al saber montar la historia de la gaviota con sus vuelos en Cádiz a lo largo de las estaciones. De altos vuelos.

La previa

El coro de Barbate tuvo un magnífico estreno en el pasado Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas del Gran Teatro Falla con 'La fábrica de conservas'. Tras alcanzar el pase a semifinales, el objetivo de 'Las del puerto' será mantener las buenas sensaciones que ofreció su repertorio.

Los buenos resultados de la primera experiencia hacen que se mantengan los cinco autores que iniciaron este bonito proyecto. A la cabeza está José Manuel Cardoso, que en este 2023 presenta también las comparsas 'Los catetos, una comparsa de afuera' y 'El tranvía'. En cuanto a los históricos, se mantiene al pie del cañón Manolo Varo, autor de míticas agrupaciones como 'Los jinetes de la Pampa', 'Filo andaluz', 'Cargadores gaditanos' o 'Cañones de Cai', entre otras. Completan la terna José Manuel Pérez Martínez, María del Mar Ramos Benítez y José Gutiérrez Ponce.

De esta forma, las buenas bases creadas se mantienen en este 2023 con un tipo que volverá a tener sabor a mar, manteniéndose ligado al carácter de la localidad de Barbate.