¡¡¡Pim, pam, pum!!!

Localidad:

Cádiz

Letra: Enrique Valdivia Bosch

Música: Enrique Valdivia Bosch

Dirección: Enrique Valdivia Bosch

En 2013: El coro de Julio

El tipo. Un duelo a pistola entre dos caballeros de mediados del XIX.

Las coplas. Un duelo un tanto extraño. La mitad del coro exige una satisfación a la otra mitad porque han tonteado con su dama. Los ofensores, sin embargo, están un tanto bebidos y no se puede desarrollar bien el ajuste de cuentas. Un duelo extraño, digo, también en interpretación que se tuerce por momentos. Bien traído el primer tema del tango a su tipo. La justicia. "Justicia de pago", "justicia dejó de juzgar" en una letra donde se tocan la Ley Parot, los desahucios, los privilegios que los pudientes tienen en las cárceles... Buen desarrollo para un remate de amenaza a la vuelta del ojo por ojo (que tiene de justo lo mismo que puede tener la ley del más fuerte. En fin...). Al cristo de la Misericordia, el señor viñero, le dedican un segundo tango, algo mejor cantado, desde la voz de una devota que "si hubiera nacido hombre" estaría cargando ese paso el Lunes Santo. Cuplé a su suegra, que es "suegra-suegra" y, así, como quien no quiere la cosa, dejan caer las señas de la mujer ahora que está sola, y que tiene mucho dinero, y que la llave la guarda bajo el felpudo... Está simpático. Siguiente para los difuntos Sarita Montiel y Manolo Escobar, reguleras. Estribillo cortito, de gatillazo. En el popurrí retan a nuestros oídos. Sus carencias se hacen muy evidentes en esta pieza. Sus tiritos reivindicativos no llegan certeros.