Comparsa Los buscadores
Comparsa de Fran Quintana
La comparsa de Fran Quintana, tras años de evolución positiva, alcanzó su madurez con 'Los desvelaos', una agrupación que sin embargo no obtuvo el premio de las semifinales. De cara al COAC 2019 el grupo, liderado ahora por Ernesto Argibay Galleguito y que contará con solo doce componentes, sufre una importante transformación para dar por fin el salto que llevan años reclamando con su buen hacer sobre las tablas.
Actuación en semifinales
FICHA
Localidad: Cádiz (Cádiz).
Letra: Francisco Javier Díaz Quintana.
Música: Francisco Javier Díaz Quintana.
Dirección: Ernesto Argibay Espinosa.
Representante legal: Javier Vázquez Leal.
En 2018: Los desvelaos (cuartofinalista).
Un repertorio dorado. Siempre es necesario revisar nuestro pasado para tenerlo en cuenta en nuestro presente. Por ello, el Carnaval debe rebuscar en sus raíces para comprender cuál es el camino que debe seguir en la actualidad. Con una propuesta sencilla, sin estridencias y con lo justo y necesario para ofrecer un estilo que parece olvidado pero que siempre regresa, la comparsa de Fran Quintana confirma que merecía dar el salto a las semifinales con una reluciente actuación. Sus letras demuestran el buen hacer de un autor al que por fin le ha llegado su premio tras muchos años intentándolo. Dos pasodobles al nivel de lo que se espera en esta fase. Traen un palo como primera copla a la pederastia y los abusos que sufren los niños. La interpretan sólo a caja y bombo para separarse del camino fácil al alejarse de los casos protagonizados por la Iglesia -que también hay que denunciar- para recordar con mucho acierto que la mayoría de los abusos se producen en el entorno más cercano. Por ello, no callarán mientras que un sólo niño siga sufriéndolos. Tiran de que la comparsa sólo tiene 12 componentes en la segunda letra para decir que esta agrupación está arropada por toda la gente que está a su alrededor para que pueda salir adelante, por lo que en estas personas ellos han encontrado "el oro de la vida". La inseguridad del grupo hace que se pierda un poco la letra en un regular primer cuplé al cantarle al adelanto electoral. Auguran que al celebrarse cerca de la Semana Santa algún despistado votará en la urna del Santo Entierro. Bastante mejor el segundo cuplé a lo mal que está su Peugeot 406, que lo conservan desde el Mundial de España 82. Son tantos los desperfectos que tiene que le cambian el nombre y pasa a llamarse Peugeot Juan José Padilla.
El veredicto del Diario del Carnaval
Actuación en cuartos
- el tipo. Buscadores del oro del Carnaval.
- las coplas. Ríos de coplas que guardan el estilo más puro. Una esencia que no se olvida, pero que cuesta encontrar. El gusto no está reñido con la contundencia en las letras, ésas que permiten a la comparsa de Fran Quintana completar otra brillante actuación. Tesoros que relumbran en el sabor añejo del pasodoble para confirmar las expectativas creadas el primer día. En la primera letra, un hombre le dice a su madre lo feliz que es porque le acompañe en el día de su boda mientras que califica a su otra madre como una hipócrita por fallarle en un día tan señalado. Un relato que esconde una crítica contra la Iglesia por negarle el matrimonio a los homosexuales. Mucho más dura y directa la segunda al líder de Vox, Santiago Abascal, por su ideario político al pretender arreglar el drama de las pateras "cerrando puertos y aumentando los muertos sin contemplaciones", por lo que avisan que "cada voto es una bala y una vida en el fondo de los mares". Por ello, no quieren entrar en razón con "un psicópata". Tanda de cuplés por encima del nivel medio. Juegan con el doble sentido -que casa con la idea- al contar que una chavala de 18 años se cayó en el Falla y tuvieron que ponerle puntos en el mismo foso. En el segundo, la plantilla del Cádiz aprovecha la plataforma de la comparsa del Chapa para hacerse la foto oficial al dejarla fuera del Falla. Oro puro.
El veredicto del Diario del Carnaval
Actuación en preliminares
- El tipo. Buscadores del oro del Carnaval.
- las coplas. El Carnaval más verdadero. Sencillo, con gusto, sin estridencias y con un sonido clásico que se aleja de la modernidad. Fran Quintana demuestra que la herencia carnavalera le viene de familia y presenta una comparsa sin más pretensiones que agradar de la manera más clásica, pero a su vez la más agradecida. Aunque se presta al metacarnaval, la idea la sabe explotar desde la presentación, en la que estos buscadores son aprendices de la fiesta que buscan la esencia y el oro de Cádiz. Ya en los pasodobles, la propuesta aparece más reflejada tanto en la música, una delicia que suena a otra época, con en las letras, escritas de una forma más añeja. Buena defensa de la idea y de la copla sencilla en el primer pasodoble, en el que recuerdan que los gaditanos son los dueños de esta esencia. Hilada de manera notable la segunda copla, en la que parten de la situación de los copleros que no podían cantar con libertad en las Fiestas Típicas en los años 50 para acabar dándole la vuelta al mirar hacia el futuro, ya que echan en cara que en el 2050 siga gobernando la extrema derecha por votarles en el 2020. También reivindican el Carnaval de otros tiempos con dos cuplés por encima del nivel de la modalidad, con un toquecito satirón y utilizando el doble sentido. En el primero, una mujer le enseña la pepita y ellos hacen lo mismo con su lingote, pero al final se les funde. En el segundo, un hombre se hace un injerto de pelo, pero le salen ricitos chicos y la coronilla le huele a pescado. Los ríos de los clásicos de la fiesta muestran el camino del Carnaval auténtico. Ése que no se debe perder a pesar de que los tiempos han cambiado.
No hay comentarios