Coro Gran Reserva

El equipo formado en 2018 entre Antonio Procopio y Miguel Ángel García Argüez El Chapa y que tan buenos resultados dio con 'Tiempos modernos' vuelve al Falla con 'Gran reserva', esta vez sin Tino Tovar como autor de la música, tarea que recae en el propio Argüez. Su estilo reivindicativo les valió para alcanzar las semifinales y llamar la atención en una modalidad que este año experimenta grandes cambios. Parten como un grupo muy a tener en cuenta en este COAC 2019.

Actuación en semifinales

Una tribu gamberra que no se arrodilla ante el capitalismo, por lo que prefieren vivir haciendo el indio en su pradera. El coro de Procopio y García Argüez deja dudas en su tercera actuación. Ni la interpretación -con algunas imprecisiones a lo largo de todo el pase- ni las letras acompañan en el momento más decisivo si se aspira a repetir en la última noche del Concurso. No cuaja el mensaje del primero de los tangos, en el que comparan la lucha de Andalucía el 4 de diciembre de 1977 con las manifestaciones que se produjeron tras los resultados de las elecciones andaluzas. Justifican de una manera discutible que prefieren que se quemen contenedores antes de que se repita la historia y vuelva el franquismo -tal vez, esto hay que hacerlo en las urnas-. Excesiva dureza, aunque con cierta razón, en el segundo a la pederastia dentro de la Iglesia. Usan como hilo los besos para lamentar que los niños que han sufrido abusos ya no quieren que les den besos, por lo que maldicen al "Dios cabrón" que perdone este drama. Bastante flojetes los dos cuplés. Tiran de ironia, sin mucho efecto, en el primero a la cantidad de procesiones que hay, pero le dan la vuelta al convertirlas en agrupaciones que cantan en la calle. Decaen mucho en el segundo al transformar la corrección en insultos a un árbitro.

El veredicto del Diario del Carnaval

Actuación en cuartos

• el tipo. Indios que viven en libertad.
• las coplas. Una gran reserva que no se vende a pesar de los deseos capitalistas. Una tribu guerrera que sólo quiere cantar en libertad. La competición de verdad se pone en marcha con un buen pase del coro de Procopio y García Argüez. Con las buenas bases que dejó en su primer pase, sobre todo por su concepto y su apuesta por un coro con un mensaje más comprometido, apuestan fuerte con las letras. Con el gustito agradable que deja la música del tango en el paladar y su corte sencillo, abren la tanda con una buena letra de denuncia sobre la influencia que tiene la proliferación de los apartamentos turísticos en los precios de los alquileres de las viviendas. Lamentan que se le "está robando el corazón" a Cádiz con la expulsión de los vecinos del centro de la ciudad por un turismo que "arrasa" al casco antiguo. Bajan un poquito con la segunda letra a los niños, en la que parten de todo lo que se imaginan que les gusta ver de sus hijos al jugar, disfrazarse en Carnaval o ir a la escuela con su abuela. Sin embargo, al final lo giran con acierto para tratar el drama de la inmigración. Tanda desigual de cuplés. Mejor el primero a la designación de Joaquín Sabina como pregonero, por la que "el estanco de enfrente" es quien está más contento. Oportunista y concursero el segundo a Canal Sur por el lío con la cantera -se podría hablar del poco apoyo que la cantera tiene desde el propio mundo del Carnaval-.

El veredicto del Diario del Carnaval

Actuación en preliminares

• el tipo. Indios que viven en libertad.
• las coplas. Suenan tambores de guerra. Una lucha contra el sistema y el capitalismo para mantener la libertad que a estos indios les ofrece su gran reserva. La unión de García Argüez y Procopio vuelve a dar buenos frutos con un coro diferente a lo que se estila en la modalidad, muy centrado en el mensaje, aunque algo más alegre que hace un año. Una apuesta que se nota desde la presentación, con alguna imprecisión, en la que ya queda marcada la dirección del repertorio: una rebelión contra el hombre blanco para traer la humanidad y la dignidad. El Chapa se estrena como músico de tango con una pieza sencilla, sin florituras y que destaca cuando va mecida. En las letras, se guardan el material potente para las próximas fases al optar primero por una copla de presentación en la que muestran su tango, que no se define como clásico ni moderno. En la segunda, se nota el sello de García Argüez en su desarrollo al dedicarlo a la mujer como gran jefa de la tribu gaditana. Los cuplés se quedan un paso por detrás, sobre todo por el tufo a ajuste de cuentas que tiene el segundo a Fernando Santiago y sus críticas al disfraz de María Romay en la pasada final, por lo que le dicen que a él "se la pone dura Vicente Sánchez vestido de cura". No lo mejora el primero dedicado a los problemas que podemos tener por ayudar a los inmigrantes y si te cogen con una china. Sobresale más el mensaje que el efectismo en el popurrí.