Coro 'El gallinero'

Cádiz/El jaleo puede aparecer en cualquier momento en el Gallinero del Gran Teatro Falla. El coro de Los Estudiantes corrobora en la Gran Final su buen concurso con una propuesta que sabe moverse bien gracias a unas claves muy carnavaleras, un buen montaje musical en el popurrí, una presentación muy potente que se pega muy fácilmente y letras a la altura de la última noche del Concurso del Falla. Resalta la originalidad temática y el tratamiento del primer tango dedicado a las enfermedades raras y a su celebración el 28 de febrero, el mismo día en el que se celebra el Día de Andalucía y esta Gran Final del Falla. Un letra que sirve de denuncia por ser "invisibles y desconocidas", y estar "marginadas en tu rincón". Por ello, y ante una sanidad que se encuentra colapsada, aseguran que a las personas que las sufren les toca "tragar saliva" mientras que "el milagro no acaba de llegar". Quizás, el remate se pasa un poco de frenada al decir que mientras que no haya "cura para tus males, Andalucía puede esperar", siendo ambas cosas compatibles, tanto la mejora en la inversión de la investigación de las enfermedades raras como la cura de los males de Andalucía. Más directa y apelando a los sentimientos del público carnavalero la segunda copla a la Gran Final del Falla y el botellón que se celebra en su exterior. Lamentan que ya nadie hace pasacalles porque la "gente está borracha" en su entorno ni se canta en la escalerilla de Medicina tras los premios, por lo que le echan la culpa a "los tres malajes" que "no saben estar y vivir mi fiesta con el respeto que se merece nuestra final". Tienen mucha menos fuerza los dos cuplés. En el primero, piden cambiar al jurado por un veterinario por la gran cantidad de tipos de animales. Muy previsible el segundo al viaje de la princesa Leonor en el Juan Sebastián de Elcano, ya que dicen que si Leonor se parece a su abuelo acabará en la bodega. ¡La que estáis formando, chiquillo!

Semifinales

Gallinas que dan vida al Gran Teatro Falla con el jaleo que forman en el Gallinero. El coro de los Estudiantes sigue lanzado en su paso por el Concurso. Con metacarnaval bien hecho gracias a unas partes fijas muy poderosas por montaje y desarrollo, las coplas de estreno consiguen mantener el nivel de lo ya mostrado, lo que le convierte en un aspirante a todo en esta edición. Lo consiguen sin abandonar el espíritu crítico en unos tangos con una música que sabe mezclar todos los ingredientes necesarios. Bastante buena la primera letra a los discursos “del odio y del miedo” propagados desde la extrema derecha entre el racismo con los inmigrantes, el antifeminismo o la ruptura del modelo de familia tradicional. Denuncian que siembran “la mentira y la rabia en la gente”, y castigan “al diferente”, por lo que no compran estos mensajes y rematan diciendo con firmeza que “la diferencia no nos divide ni los colores de nuestra piel”. Más rotunda si cabe la segunda copla a la moda que tienen los de fuera de sentir Cádiz como si fueran gaditanos. Una sentencia contra la que se muestran en contra con acierto al aseverar que la ciudad solo tiene un dueño, “que es la gente de aquí”, ya que es la que padece sus “fatiguitas los 12 meses del año”. Motivos más que suficientes para que Cádiz sea “de los que la sufren y la levantan”. Desiguales los dos cuplés. Algo mejor el primero al concierto de Antoñito Molina en el Nuevo Mirandilla, en donde habrá más colados que en el Gallinero. Bastante más flojo el segundo a la apertura de un Onlyfans para enseñar su cuerpo y ganar dinero, aunque prefieren que enseñen “a hacer menudo”.

Cuartos de final

El tipo. El Gallinero del Falla. Las coplas. El motor del teatro. El Gallinero del Falla es un universo particular, aunque venido a menos por la globalización de la fiesta. El coro de los Estudiantes da un golpe encima de la mesa con una brillante actuación en la que las coplas de estreno redondean un repertorio animado, atractivo y bien montado. Porque metacarnaval se puede hacer siempre que se haga bien y se aporte algo diferente a acudir a los temas manidos. Potente desde la presentación, en la que se muestra al Gallinero como la voz del Falla por febrero, los tangos elevan el listón en la modalidad apoyados por una música con todos los ingredientes que necesita y un remate muy viñero. Cae en el primero una nueva crítica a la turistificación que sufre Cádiz, pero desde un punto de vista muy original y bien planteado al contar una historia de amor entre un gaditano y su ciudad. Un habitante que se tuvo que marchar por negarle el pan pero al volver vio que su ciudad “se encaprichó de un noviete extranjero”, por lo que alertan “de los amores de verano” ya que no habrá nadie que la quiera como un gaditano. No se queda a la zaga la segunda a las críticas que sufren las mujeres por ser libres y “ser yo la que elige quien mete en su cama”, teniendo que aguantar el calificativo de “puta”, por lo que soportan “el pecado de ser mujer”. Acompañan los dos cuplés. El primero se queda antiguo por hablar de los jugadores del Cádiz CF al tratar las modas de los jugadores al marcar un gol. Mucho mejor el segundo a la traducción simultánea en varios idiomas en Canal Sur, por lo que se imaginan la cara de un guiri al convertir un cuplé cantado por la Juani.

Preliminares

el tipo. El Gallinero del Falla. las coplas. La voz del teatro. El coro de los Estudiantes mantiene el cambio de registro de la pasada edición con un repertorio que, aunque entra de lleno en el metacarnaval, sabe diseccionar al aficionado que ocupa la parte más alta del Falla, por lo que escapa de las claves que se suelen repetir en este tipo de repertorios. Animado de principio a fin, con un grupo que sigue sonando muy bien y, sobre todo, un tango precioso que respeta los cánones clásicos mezclando los pianos con el pellizco necesario y sin desviarse del camino, el resultado es casi redondito. La definición del Gallinero que hacen en la presentación ya deja entrever la senda que luego tomará en el popurrí, en donde profundizan en la idea. Sigue el metacarnaval, aunque con sentido por ser la primera fase, en los tangos. Primera letra de presentación dedicada al propio tango, del que dicen que es “la banda sonora del gaditano”. Muy oportuna la segunda al pedir a las agrupaciones que le tengan respeto al público trayendo un mínimo de calidad. Solo simpaticones los dos cuplés al dinero que cuesta hacer una maratón y a la comparsa ‘El hum’. Tienen un piquito de oro.

La previa

El coro de Los Estudiantes apostó en la pasada edición del Concurso Oficial de Agrupaciones Carnavalescas del Gran Teatro Falla de Cádiz por cambiar la concepción de su repertorio, optando por un estilo algo más clásico en las partes fijas. No consiguió el resultado esperado al quedarse fuera de la Gran Final con 'La fiesta de los locos', un puesto que intentará recuperar en 2025 con 'El gallinero'.

Como nota curiosa, el nombre elegido ya se usó en esta modalidad en la edición de 1987. Este coro llevó letra y música de Salvador Longobardo y Eduardo Bablé, quedando en quinta posición.

No habrá cambios significativos en un grupo que ya está más que asentado en el COAC. El repertorio volverá a correr a cargo de Antonio Bayón y Rubén Cao, contando con la dirección de Pilar Tejada y Carmen Cabañas.

El coro de Los Estudiantes ha tenido varios formatos a lo largo de su historia. El actual parte de la cantera en el año 2006 con el junior 'Rógura quiberba', al que siguieron 'Los musilocos' (2007), 'Los guardianes' (2008), 'La estudiantina' (2009), 'Pesadilla antes de Carnaval' (2010) y 'Asante sana' (2011).

El salto a adultos lo dio en 2012 con 'Teatro Barvariedades'. Su primer hito fue en 2014 con 'Los bacanales', que ya consiguió entrar en semifinales. A partir de ahí, ha estado en la Gran Final con 'La reina de la noche' (cuarto premio en 2017), 'Rockola' (tercer premio en 2018), 'La nueva era' (segundo premio en 2019), 'Pachamama' (primer premio en 2022) y 'El día de mañana' (segundo premio en 2023).