Coro Los garabatos

Los garabatos de un niño pueden crear miles de aventuras. Una imaginación con mirada nostálgica con la que Rafael Pastrana, junto a sus hijos, le recupera el pulso al Concurso. Un tercer pase en el que el tango sigue estando por encima de todo, aunque las letras avanzan tímidamente respecto a su anterior actuación, aunque sin mostrarse con la contundencia necesaria en el momento en el que todo está en juego. Una rotundidad que sí se le ve a la idea y al enfoque, así como a lo musical y a lo interpretativo. Al menos, las letras no divagan y son mucho más directas al andarse sin ambages. En el primero, se agradece que dejen atrás los piropos que hicieron a la mujer y que ahora definen como “machistas”, por lo que destacan otras virtudes y la convierten en una “reina guerrera”. Así, le dan la vuelta a tangos que “callaron la realidad”, pero se quedan a medio camino para rematarlo con más fuerza. Aunque con un pequeño exceso en el remate, mucho mejor el desarrollo de la segunda letra al llevarla al tipo para contar lo que sucedería si el niño que creó este barco con sus garabatos lo gobernara. Una inocencia que derribaría las fronteras y callaría los tambores de guerra. La imaginación no fluye tanto en los cuplés a las gallordas que se hacen con 40 años y al cambio que dan cuando su hija se echa un novio rico.

El veredicto del Diario del Carnaval

Actuación en cuartos

el tipo. Marineros en un barco de papel que nace de la imaginación de un niño. las coplas. Una nueva navegación que parte gracias a los garabatos de un pequeño. Un mar de recuerdos que dan forma a un repertorio que tiene al tango y a la melancolía como pilares. Con cierto aire acomparsado en algunos momentos, el coro de los Pastrana ofrece un segundo pase en el que las letras se quedan un poco por detrás del resto de la propuesta tanto en su concepto como en su montaje. Una diferencia importante en comparación con la música del tango, que sí se pega fácilmente. Aunque en algunos momentos sí se pueda aceptar la idea, el tremendismo del remate de la primera copla desluce su resultado global al hablar de una tercera España que vive “sin el puño en alto ni la mano alzada” y que no tiene “más ideología que la paz y la libertad”. Sin embargo, temen de forma excesiva una nueva guerra civil. Pierden la oportunidad en el segundo tango de hacerle una crítica al alcalde al reconocer Pastrana que está muy alejado de su ideología. Sin embargo, la letra acaba con una idea buenista al decirle que se pondrán a su lado si Cádiz resucita. Naufragan con sus cuplés. En el primero, el robot aspirador les dice que barran ellos. Su mujer sabe lo que es el poliamor en el segundo al estar tirándose a un policía.

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Actuación en preliminares

el tipo. Marineros en un barco de papel que nace de la imaginación de un niño. las coplas. Una travesía que navega gracias a la mente de un niño. Una imaginación que hace que un barco vuelva a encallar en el Falla, en donde los adultos se sienten como niños. Fali Pastrana se rodea de sus hijos para regresar al Concurso con una idea con cierta melancolía. Dentro de lo imaginativa que es, toma cuerpo al definirse con soltura en el popurrí al bucear entre el recuerdo de la infancia y el Cádiz del ayer. Un regreso esperado que cumple con nota y que viene a apretar la competencia en la modalidad, aunque no se presenta con la superioridad de su anterior etapa. Con más potencia en la presentación, quizás algo excesiva, por lo que la vocalización se resiente, vira en el tango con una música alegre que brilla más en el piano que hacen antes de encarar el final. Letras de trámite, ambas correctas para superar la primera fase. Presentan el tango con una letra metacarnavalera que se desvía del camino de muchas coplas de preliminares al pedir a las agrupaciones que le tengan respeto al Falla, ya que algunos grupos vienen a “hacer el caricato”. Nueva letra a David Palomar en la que lo comparan con los grandes flamencos de Cádiz. Desbarran en los cuplés. En el primero, el alcalde no encuentra un informático que le retoque las orejas en una foto. Bastinazo grave en el segundo al echarle su novia sacarina en “el nabo” porque está a dieta. A toda vela.

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La previa

Faly Pastrana regresa a la modalidad de coros rodeado de un nuevo grupo y compartiendo autoría con sus hijos Rafael y Marcos, que también se encargará del diseño del tipo y el atrezzo. Entre los componentes, caras conocidas de la modalidad como Juan Patrana, Manolo Guimerá o Paco Oliva para llevar al Falla 'Los garabatos' en 2020. El laureado autor descansó este año, logrando el segundo premio en su última aparición en el Concurso de Agrupaciones con 'Los chimenea'.