Coro Cádiz desde el cielo

El sello clásico del tango en el COAC 2019 seguirá teniendo la firma de Quico Zamora, en esta ocasión acompañado en la autoría por Juan Fernández y José Manuel Varo. El pasado Concurso, con Abraham Sevilla y Antonio Segura como coautores, fueron cuartofinalistas con 'Los queus de Cai'.

Actuación en cuartos

• FICHAel tipo. Vigías.
• las coplas. Una vista diferente para poder ver a Cádiz desde las alturas. Sin pretil, todo suena diferente al recuperar el coro su configuración tradicional, aunque el sonido del grupo no es del todo limpio. Un avance que, sin embargo, no tapa las lagunas de un regular repertorio que se va desplomando cuanto más avanza. Sigue sin brillar la música del tango, alejada del estilo habitual de este coro y con un cambio en su tramo final que lo desluce. Poco gancho en las letras. Demasiado rebuscada y mal llevada la primera letra al tratar la vida del rey emérito Juan Carlos I a partir de los nombres de agrupaciones de Juan Carlos Aragón. Al final, se pierde el camino inicial al decir que a Juan Carlos le va "del carajo de jubilado" mientras que ellos, que son españoles con la bandera en el balcón, están apuntados al paro. Sólo un poco mejor la segunda copla para pedir la concesión de la Medalla de Andalucía a Antonio Martín. Aseguran que "la medalla no es medalla" si no la tiene el coplero de la calle San Vicente. Dos cuplés con poca vista. Paquirrín no ha conseguido quitarse la cara que tiene de chimpancé en el primero. En el siguiente, se quejan de la "mierda de concurso", por lo que piden que quiten Gran Hermano.

El veredicto del Diario del Carnaval

Actuación en preliminares

• el tipo. Vigías.
• las coplas. Desde una torre mirador, Cádiz se ve como si fuera un paraíso. Juan Fernández le da un aire algo diferente al coro de Kiko Zamora. Sin embargo, los constantes desajustes del grupo en su interpretación -debido a la colocación de la escenografía a pie de escenario, que hace que la disposición del coro sea recta en vez de curvada- hace que en algunos momentos sea complicado seguirle el hilo al repertorio, que se va desinflando a pesar de que en la presentación no apunta malas maneras. El tango suena distinto a las anteriores propuestas de Kiko Zamora, sobre todo al tener un inicio más recio, pero desde el trío se acaba perdiendo al alargarse en exceso y perder fuerza. No acompañan demasiado las letras. En la primera, vuelven a salir los problemas que tienen los carnavaleros por la vigilancia que realiza Hacienda de sus actuaciones, por lo que dicen que "se va a llevar un buen carajo de La Caleta" -sin anestesia-. No remontan con el segundo a Andalucía y sus enseñanzas a su hija, que aún no tiene uso de razón, para defender a la región de las declaraciones de Isabel García Tejerina. Doble remate con las orejas del Kichi en los cuplés, ambos flojos. En el primero, deja la ciudad libre de humos al moverlas, mientras que en el segundo las tiene como un pestiño. Destaca más la intención al contar el paso del día que el desarrollo del popurrí. La niebla no deja ver su horizonte en el Concurso.

El veredicto del Diario del Carnaval