El marqués de pocas tierras

Marqueses con poco dinero y también poca vergüenza es el tipo de estos onubenses, que cierran sesión. Cuentan sus visitas a la Zarzuela en su primer pasodoble. En el segundo narran lo muy sencillos que son. Primer cuplé para un amigo al que no conocen sin su niño y segundo para los vídeos que se graban con el móvil. Flojos, flojos. Y el estribillo... digamos que poco elaborado. El popurrí deja casi dormidos a los pocos que resisten en el teatro, que sólo se animan con palmas al final. Ni se acercan a su actuación del pasado año.