Los palmeros

Coro

Foto: Lourdes de Vicente y Fito Carreto
Foto: Lourdes de Vicente y Fito Carreto
Tamara García

07 de febrero 2015 - 06:00

Localidad: Cádiz

letra. Andrés García Requejo.

música. José Ramón Zamora Cabeza.

director. José Ramón 'Quico' Zamora.

el tipo. Alegoría del compás de Cádiz.

En cuartos:

Los mismos problemas de coordinación que mostraronen preliminares los siguen exhibiendo en la presentación y parte del popurrí de estos cuartos de final. Los palmeros ejecutan, una vez más, la pieza explicativa de un tipo de los que no se entiende a primera vista. Falseta muy gaditana para hacer de antesala a los tangos. A principios de los 70 un niño "con Down" se escolarizaba y con ese logro se "abrió el camino y muchas cosas se han conseguido". Pero ahora este gobierno no ha tenido en cuenta el daño a esos niños, a esas "criaturas que necesitan ser uno más en la escuela". Así dice el primer tango, que no está nada mal. En el segundo, sin embargo, hablan del Rocío y de los caballos que se quedan medio muertos después de hacer el camino (que me acuerde eso es una imagen viral de las redes sociales). No sé, no lo veo un tema muy para aspirar a la siguiente fase. En los cuplés, igual. Uno aceptable y otro poco acertado. El segundo es el que está bien, jugando a la confusión entre Teo y Theo (Vargas). Ene l primero la alcaldesa se parece a Campanilla (¿?) subida en una bici (¿?). Creo que hasta aquí llegaron.

En preliminares:

"...siempre he pensado que no hay memoria colectiva, lo que quizá sea una forma de defensa de la especie humana" (El túnel, Ernesto Sábato) Y es que el escritor argentino no conocería el Carnaval de Cádiz ni su Concurso, que recopila, recuerda y transmite, de generación en generación. Hoy, un nuevo capítulo de esta memoria común, en la décimo tercera sesión preliminar. Abre un coro que tira del adn del 3x4 para su presentación, arrancando con nudillos y desarrollando con la orquesta. En esta pieza nos cuentan como ellos aplauden a todo el mundo, de fenicios a romanos, a Teófila Martínez y a Carlos Díaz, a prensa y patronato excepto "a los sinvergüenzas que quieren cargarse a mi pueblo dragando el Guadalquivir". Poquitos pero bien entonados durante un repertorio jaleado, además, por sus propios palmeros que marcarán el compás en diferentes momentos de la propuesta. El tango es lo que no termina de encajar con una falseta que comienza muy bien pero que tiene una vuelta que, aunque en el segundo suena mejor, en el primero no ha terminado de pegar. De todas formas, la gran pega está en el contenido, se parecen demasiado ambas letras, tienen la misma intención. Si la primera es un piropo a Cádiz, al tango y al compás. La segunda es un tributo, ahora exclusivo, a Cádiz. No están mallos cuplés a una italiana que se enamoró de un gaditano y a la vuelta ciclista con Elcano. El estribillo es simplón. Y el popurrí, rítmico y flamenco pero no dice mucho. Regular.

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