Los sensiblones

En preliminares

El tipo. Hombres muy sensibles. las coplas. Repertorio para echarse a llorar. Más inocentes que sensiblones. Lloran por absolutamente todo. Tanto que en vez de apadrinar ellos a un negrito es el negrito el que les apadrina y les da pañuelitos. Al final, no hay mayor emoción que le parieran como un chirigotero -todos dicen lo mismo-. Actuación muy discreta para un tipo que no da mucho de sí. Como no podía ser de otra manera, su vena sensiblera también aparece en el primer pasodoble, en el que piden perdón por si se ponen a llorar como un niño pequeño porque se debe a que están cumpliendo su sueño. Trámite para los que vienen por primera vez de fuera. En el segundo, flojea el desarrollo de la letra al miedo que siente un homosexual por darle un beso a su novio para no sufrir una agresión homófoba. Se pasan de sensbiles en un flojete primer cuplé en el que su novia se va de Erasmus y liga, pero lloran de emoción por ver lo bien que se lo pasa. Indescifrable el juego de palabras erótico-festivo del segundo cuplé al ligar con una japonesa. No se espabilan ni con las tortas de su madre para que lloren con razón. Magnífico el "¿Kleenex? Soy yo" del popurrí.

La previa

Nueva chirigota de San José de la Rinconada avalada por la colaboración en música de Antonio Álvarez 'El Bizcocho'. Fue protagonista involuntaria de la anécdota del periodo de inscripción al 'robarle' (por un error del Patronato ya subsanado) la cabeza de serie a la chirigota de sus paisanos, tercer premio en el COAC 2017.