Román: "Chiclana es una locomotora en marcha y yo llegué a un tren parado"

Chiclana/José María Román aspira a la reelección como alcalde de Chiclana con el PSOE. Durante la entrevista, se levanta en varias ocasiones para apoyar sus respuestas con documentación. En el despacho de Alcaldía abundan los montones de papeles llenos de anotaciones, uno por proyecto.

-¿Con qué expectativas parte en estas elecciones?

-Salimos a ganar. Hemos hecho un gran trabajo y vemos un gran respaldo en la calle. Creo que podemos conseguir una mayoría absoluta que permita tener solidez en el Gobierno. En cualquier caso, si algo hemos aprendido es que el diálogo y el consenso son imprescindibles. Me sorprende mucho el tono de algunos que aspiran a la Alcaldía cuando hablan: desprecian opiniones de terceros, creen estar en posesión de la verdad absoluta y tienen una escasa capacidad de escuchar.

-¿A quién se refiere?

-Hay mucha gente que está en la vida pública así. Hay mucha impostura.

-Habéis incorporado a independientes y concejales de otros partidos a vuestra lista. ¿Por qué?

-El PSOE es un partido que responde bien en Chiclana, pero el tiempo me dice que tenemos que abrirnos a la sociedad. Es lo que decía antes de escuchar. Que tengamos un número de afiliados importante y gente muy capaz no está reñido con que, al mismo tiempo, seamos capaces de ver que para conectar aún más con la ciudadanía debemos incorporar a gente que puede participar del proyecto. Lo que hacemos es crecer hacia fuera. Tenemos en la lista gente con un buen perfil profesional, juventud y experiencia y gente que sabe que no van a salir como concejales, pero se suman al proyecto por Chiclana. Tenemos una candidatura muy potente para gobernar y un grupo de personas dispuesta a apoyar.

-Hablando de transversalidad. ¿Se siente cómodo cuando un miembro de la lista de Vox dice que le va a votar a usted?

-Sí. A nosotros nos vota mucha gente de la izquierda, en la que nadie vota al PP, y nos vota gente que se siente de centro. Y yo me siento cómodo en el perfil de la socialdemocracia europea que trajo el estado del bienestar y que hoy está tan cuestionado por el nuevo liberalismo. En la vida municipal hay mucha gente que se siente de derechas pero interpretan que el PSOE gobierna para todos, lucha para Chiclana y dialoga buscando el mejor futuro para la ciudad. A mí me dice mucha gente: mira, soy de derechas pero te voy a votar.

-¿Y cómo interpreta eso?

-Pues creo que es el reconocimiento a una labor. Hay un grupo de 20 personas que es de Vox y me ha dicho que todo el grupo que representan me va a votar a mí. Mire, cuando volví al gobierno hace ocho años me encontré un Ayuntamiento sin proyectos, arruinado por la bajada del IBI de la señora Hita. Ahora mismo tenemos 55 millones de euros en proyectos en marcha y todo un conjunto de actuaciones que están y estarán. Chiclana es una locomotora en marcha y yo llegué a un tren parado.

-¿Qué proyecto considera el más importante para la ciudad?

-Hemos cumplido el 80% del último programa electoral e incluso hemos añadido algunas líneas más. Nos ha costado tiempo porque ha habido que sanear las cuentas, pero hoy la calle se limpia a diario después de que el PP hiciera una bajada temeraria de impuestos a cambio de limpiar sólo dos o tres a la semana. Hemos incrementado los servicios públicos porque es la función del Ayuntamiento. Ese falso mantra de reducir impuestos porque sí lleva al desmantelamiento de la Sanidad, la Educación y otros servicios públicos. No soy yo maximalista en estos temas, lo que soy es de mínimos: lo que haya que hacer, pero sin jugar con las cosas del comer. Es una cuestión de modelo de ciudad. Y la limpieza es un tema capital.

-Usted, como casi todos los candidatos, reconoce que falta inversión en vivida pública.

-Sí, porque tenemos un problema: muchos trabajadores no pueden pagar alquileres o comprar vivienda con su sueldo. Ahí debe aparecer la administración pública, para equilibrar y compensar a esa gente joven y no tan joven para que pueda acceder a la vivienda. Debe aparecer la compensación económica institucional para que la gente pueda vivir con dignidad.

-¿Algún otra área prioritaria?

-Las comunicaciones. Debemos mejorar la capacidad de competitividad que ya tiene Chiclana. Lo hemos hecho con carretera de Molino Viejo y carretera de La Barrosa y lo vamos a hacer con la carretera de La Laguna, de la Rana Verde, de Fuente Amarga, de Pinar de los Franceses o de Pago del Humo. En cierta medida, también en Los Barrancos, instalando alumbrado y esperando a que la Junta intervenga. También en avenida del Mueble, Camino de la Nutria, Camino de Ceuta o Camino del Sotillo con una vía principal que continúa con el Camino de la Cepa… Lo estoy hablando y lo estoy viendo. Con el Camino del Horizonte, del Almendral… Se trata de mallar Chiclana para que haya una mayor fluidez, al mismo tiempo que incentivaremos la comunicación peatonal, con carriles bicis y un nuevo pliego de transporte público. Fomentaremos que la gente vaya andando, también con una aplicación que premie a quien vaya caminando a los sitios.

-¿Que premie?

-Sí, al que demuestre que hace un número de pasos a diario. Para fomentar los hábitos saludables. Tener un coche aparcado y dar dos vueltas para aparcar son los mismos diez minutos que ir andando.

-¿Cómo avanza el nuevo Plan urbanístico?

-Estamos muy contentos. Con la nueva ley tendremos un Plan de Ordenación Urbana (POU) para el desarrollo de los suelos urbanos; y el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) para los futuros crecimientos de la ciudad. El primero ya lo hemos presentado y permitirá marcar la ciudad urbana que es hoy, con suelos que tienen la capacidad de construir 4.300 viviendas, una parte importante protegidas. El POU estará el verano que viene y da un margen importante en previsión de que, dos años después, aprobemos el PGOM. Pero de momento tenemos un binomio muy bueno: lo que da de sí el POU, unido a los planes especiales y los AFO, con los que podríamos llevar servicios básicos a las 13.500 viviendas sin licencia en Chiclana. Hay en marcha unos 20 planes especiales. Los suelos urbanos no consolidados serán suelos rústicos y tendrán las conexiones a través de estos planes, pero no entrarán en el PGOM, sino que seguirán siendo suelos rústicos.