El Alambique
Belén Domínguez
El río que nos lleva
Fiestas
La Feria de Primavera y Fiesta del Vino Fino de El Puerto ya está en todo su esplendor y tras una multitudinaria Velada en la noche del miércoles, con muchas cenas de socios en las casetas y alguna que otra banda tocando directo hasta bien entrada la madrugada, este jueves la jornada comenzaba muy tranquila, con poca presencia de público hasta media tarde, hora en la que la afluencia al recinto de Las Banderas comenzó a crecer.
Como corresponde a estas fechas del mes de junio el calor apretaba, tanto dentro como fuera de las casetas, aunque ya son muchas las que cuentan con aire acondicionado.
Si en la noche de la Velada algunas casetas albergaban actos como el reconocimiento a la ex presidenta de la Flave, Milagros Muñoz Gil, Uchi, en la caseta de Verde y Albero, de Unión Portuense, este jueves se celebraban también otras citas como una recepción en la caseta del Cádiz CF, ‘La caseta mágica’, que contó con la presencia del cónsul para Andalucía de El Salvador, el país natal del ex futbolista Jorge González Barillas, ‘Mágico González’, que cuenta desde el pasado martes con un museo y una estatua en ese país.
Autoridades municipales y provinciales se acercaron hasta la caseta, donde el coctelero portuense Juan Franco había preparado un cóctel especial, llamado ‘El mojito mágico’, a base de vino Fino, zumo de naranja, azúcar, lima y hierbabuena.
Ya por la tarde se celebraba también en la Caseta Municipal la exhibición de sevillanas que comenzó el miércoles, y que contó con la participación de varias academias. En esta última jornada se pudo disfrutar además de las actuaciones de varios artistas locales como Naty Palomo, Carmen la Shica o Estefanía Salas al cante, a la guitarra Jesule del Puerto, Javier Bey o David Cruz y a la percusión Jorge Aguilar, Jorge Lebrero o José Antonio Garrido. El evento lo presentó el periodista Adrián Verano.
La ciudad homenajeada este año, la localidad malagueña de Estepona, ha montado una caseta que recuerda a las que se instalaban hace años en la avenida principal de la Feria portuense, con una fachada de mampostería en la que se recrea una casa encalada de un pueblo marinero. En la carta también predomina el pescaíto, como no puede ser menos en la que es la tarjeta de visita de ciudad de la Costa del Sol.
A medida que avanzaba la tarde iban llegando más personas al recinto, cuyos accesos han experimentado este año algunos cambios como la pequeña rotonda improvisada al comienzo del Camino Viejo de Rota -que provocó algún pequeño accidente antes de que comenzara la Feria- o la imposibilidad de girar hacia El Puerto a la salida del parking de Viña El Rango, obligando a los vehículos a seguir hacia el cambio de sentido a la entrada de Montes de Oca.
Ya avanzada la tarde las casetas iban cambiando las sevillanas por la música en directo de grupos de versiones o flamenco.
En la llamada Calle del Infierno los niños y jóvenes disfrutaban del segundo día de descuentos que finalmente se habilitó, después de las quejas al conocerse que inicialmente estos descuentos se iban a limitar al miércoles.
Al cierre de esta edición la afluencia al recinto iba a más, para vivir la segunda noche del festejo portuense.
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