La campaña '40 días por la vida' estará en marcha en El Puerto hasta el próximo 10 de abril

El Puerto/Desde el pasado 2 de marzo, Miércoles de Ceniza, se encuentra en marcha en El Puerto de Santa María la campaña '40 días por la vida', una iniciativa que se prolongará hasta el próximo 10 de abril, Domingo de Ramos.

Se trata de una de las dos campañas anuales que lleva a cabo un grupo de voluntarios que se han marcado como objetivo ofrecer información a aquellas mujeres que acuden a abortar a clínicas especializadas.

En El Puerto más de un centenar de voluntarios se organizan durante estos 40 días en turnos de nueve de la mañana a nueve de la noche, de lunes a domingo, para acudir a las puertas de la clínica ubicada en la calle Santa Lucía, donde se reúnen para rezar y y repartir tarjetas informativas a las mujeres que allí acuden.

Una de las responsables de esta campaña, María Begoña Huerta Gómez de Merodio, explica que aunque en la Ley del Aborto se indica que se debe informar a las mujeres sobre otras alternativas, esto no se cumple y muchas de ellas no han recibido ninguna información sobre la existencia de otras alternativas antes de tomar una decisión.

Los voluntarios entregan a las mujeres que acuden a las clínicas una tarjeta con un número de teléfono donde se les ofrece asesoramiento. Esta misma semana responsables de la campaña se han reunido con miembros de la Policía Nacional de El Puerto para informarles de su presencia pacífica en la calle Santa Lucía, obteniendo el permiso necesario para permanecer allí, según explica Begoña.

El Puerto fue una de las primeras ciudades en sumarse a esta campaña, en 2016, una iniciativa que nació en Estados Unidos y que desde entonces se desarrolla dos veces al año. Se calcula que a nivel mundial son más de un millón los voluntarios que participan en esta iniciativa.

Los voluntarios denuncian además que se ha intentado "criminalizar" al movimiento provida, acusándoles de acosar a las mujeres que acuden a estas clínicas. Begoña explica que aunque se ha tratado de evitar la presencia de estos voluntarios ante las clínicas, en estos momentos los trámites para acometer un cambio en el Código Penal se encuentran en el Senado y hasta el momento su presencia en las calles, siempre que sea pacífica, es legal y no puede ser impedida.

Los voluntarios denuncian que durante el tiempo que permanecen en la calle son increpados casi a diario y reciben a menudo insultos. "A nosotros nos importan las mujeres, algunas no han recibido ningún tipo de información ni asesoramiento sobre las alternativas que existen al aborto, hay verdaderos dramas", destaca Begoña, que insiste en que su objetivo es "ayudar a las mujeres decidan lo que decidan".