Los ecologistas denuncian el "arboricidio sistemático" en El Puerto

Ecologistas en Acción denuncia el "arboricidio" que se viene produciendo en El Puerto, con talas injustificadas, podas excesivas y sin una política de reposición y ampliación del patrimonio arbolado de la ciudad. Cada vez hay menos árboles, en un contexto de cambio climático que exige ciudades más verdes.

Los árboles aportan grandes beneficios: contribuyen a mitigar el cambio climático, reducen las temperaturas hasta diez grados, promueven la biodiversidad, aumenta el bienestar emocional, es el hogar de múltiples seres vivos, purifica el aire, etc, pero según los ecologistas "el arbolado urbano no pasa por un buen momento en El Puerto. Son varios los motivos y agentes que contribuyen a ello. El Ayuntamiento tiene la máxima responsabilidad en la situación de nuestros árboles y zonas verdes. La gestión de las podas es desastrosa, tan abusivas que dejan desmochados e incluso reducidos a un tocón a los árboles de nuestras calles y plazas, provocando en ocasiones la muerte de éstos, y, además, en pleno verano o con aves anidando, cosa prohibida por el Manual de podas de la Unión Europea. Esto ha sucedido este mes de julio con las 13 melias desmochadas y algunas taladas en la Avenida de la Estación", denuncian.

También lamentan que "en los alcorques vacíos no se plantan nuevos árboles, sino que se cementan, y cuando se plantan nuevos árboles lo rellenan con cemento u otro material que impide el aporte de agua y oxígeno para que crezca saludablemente. Un alcorque con plantas silvestres puede ser un mini ecosistema lleno de vida".

El colectivo añade que "en el nuevo paseo fluvial domina el gris del hormigón sobre el verde del arbolado, lo que va a provocar que aumente la temperatura unos 15 grados, impidiendo pasear por allí en días soleados. En este paseo fluvial, y en general otros espacios, no se han plantado especies autóctonas, más resilientes al cambio climático, como algarrobos, acebuches, almeces, mirtos, madroños, fresnos, etc., sino especies que necesitan riego en un escenario en que se están reduciendo los recursos hídricos".

Tampoco se crean corredores sombreados para que la ciudadanía pueda moverse a pie o en bicicleta por calles y plazas con una temperatura aceptable y en un entorno saludable, según el colectivo.

Los ecologistas piden públicamente a Germán Beardo y Millán Alegre, "máximos responsables de esta calamitosa gestión, que se den una vuelta por la Avenida del Ejército, Bajamar, Avenida del Cisne, de la Estación… y vean esas melias y brachychitons talados, alcorques cementados, creando un entorno apocalíptico. Vayan también a la avenida de Andalucía a pleno sol, lo que antes era un fresco túnel de tipuanas, ahora es un espacio desolado, con un calor insoportable, donde media docena de pequeños árboles del amor que han plantado no dan ninguna sombra".

También denuncian el vandalismo de algunos ciudadanos que destrozan los árboles, como ha ocurrido con los naranjos recientemente plantados en la calle Misericordia o los cipreses de la Plaza del Castillo.

El Ayuntamiento ni siquiera tiene un Plan de arbolado que defina el arbolado que necesita la ciudad para mejorar su paisaje, reducir la temperatura, favorecer la biodiversidad y crear un ambiente urbano confortable. También debe definir las especies más adecuadas, el tipo y tiempo de las podas y el tamaño mínimo de los alcorques para impedir daños al acerado y favorecer el desarrollo del arbolado. "Así se acabaría con la discrecionalidad que vienen aplicando ahora los responsables de área de Medio Ambiente, sin rigor técnico ni participación social", concluyen.