La peluquera Amalia Reyes quiere donar su equipo a las víctimas de la DANA

El pasado 6 de enero cerraba sus puertas la peluquería Amalia Reyes, en el centro comercial de Vistahermosa, en El Puerto de Santa María. Su propietaria ha dejado el negocio con motivo de su jubilación precisamente el día de su cumpleaños y abre ahora una nueva etapa tras más de 40 años al pie del cañón.

Amalia, nacida en Cádiz pero criada en Bélgica, comenzó su andadura profesional en la provincia trabajando durante un año en la peluquería de la Base de Rota, para hacerlo después junto a la que más tarde sería su socia, Sonia Reyes, en la peluquería Rizos, también en el centro comercial de la urbanización portuense. Sus amigos la apodan ‘La Faraona’, tanto por su carácter rompedor como por su gran parecido físico con Lola Flores.

Por su negocio han pasado un sinfín de caras conocidas, no en vano Vistahermosa es una de las urbanizaciones favoritas para el veraneo de muchos famosos y profesionales de prestigio. Así, por su peluquería han pasado clientes como el compositor Manuel Alejandro, las bailaoras María Rosa y Sara Baras, la viuda de Rafael Alberti, María Asunción Mateo, o la cantante Paloma San Basilio, entre otros muchos. Amalia siempre ha contado con una clientela muy fiel, tanto es así que algunas clientas residentes en Madrid viajaban regulamente hasta El Puerto solo para recibir el exclusivo tratamiento de color que impartía Luisa, la hermana de Amalia. Incluso algunas clientas venían expresamente desde Francia para este fin.

En sus mejores tiempos la peluquería llegó a tener hasta 16 empleadas, así como sucursales en Valelagrana y Puerto Sherry.

Ahora, con motivo de su jubilación, Amalia tiene que dejar vacío el local de su peluquería antes del 30 de enero y quiere que sus equipos tengan una segunda vida, con especial interés en poder donarlos a alguno de los negocios de la zona más afectada por la DANA en Valencia, donde también muchas peluquerías quedaron arrasadas.

Algunos materiales ya los ha donado a escuelas de peluquería de Jerez, pero su intención es poder ayudar a retomar el negocio a compañeros de profesión de esa zona tan castigada de España que puedan recuperar sus negocios empezando de nuevo con los materiales y equipos necesarios.

Sería una bonita manera de dar continuidad a una labor de cuatro décadas poniendo guapa a su clientela.