La Policía Nacional desmantela un punto de venta de cocaína en El Puerto y detiene a dos personas

Agentes de la Policía Nacional de los grupos de pequeño tráfico de Udyco Bahía de Cádiz, en el marco de la operación Margarita, han detenido a dos personas como presuntos autores de un delito de tráfico de droga tras desmantelar un punto de venta de cocaína que se encontraba ubicado en la vivienda de uno de ellos en El Puerto.

El resultado de la investigación ha podido determinar que en uno de los domicilios sociales de un edificio se estaban dedicando presuntamente a la venta de droga a pequeña escala, concretamente a la venta de cocaína en dosis, ha indicado en una nota la Policía Nacional.

Tras las pesquisas realizadas, se confirmó que a distintas franjas horarias y distintos días de la semana, numerosas personas con perfil de consumidores entraban y salían de la referida vivienda con relativa celeridad, todos ellos con el único fin de adquirir droga.

Así, en el desarrollo de la investigación, se ha establecido que las transacciones se llevaban a cabo en el interior del domicilio investigado para no levantar sospechas. Además, se disponía de fuertes medidas de seguridad como una puerta de hierro con tres cerrojos, siendo dos de ellos de grandes dimensiones, o la presencia de "aguadores", personas al servicio de los traficantes cuya función era alertarlos de la presencia policial en la zona.

Como se ha explicado, todo ello ha servido para constatar que el morador del domicilio aprovechaba la vivienda social que poseía para llevar a cabo la venta de cocaína.

Tras solicitar a la autoridad judicial competente los mandamientos de entrada, se procedió al registro del domicilio del principal investigado, interviniéndose en su interior varias dosis de cocaína dispuesta para su venta junto con todos los utensilios necesarios para ello, como balanzas, recortes, caja de caudales y anotaciones de ventas. Además, fue intervenido dinero fraccionado en billetes y monedas.

Con esta operación, la Policía Nacional ha asegurado que la desarticulación de este punto de venta supone "la tranquilidad de vecinos y comercios próximos al mismo", evitando así el trasiego de compradores, mayormente consumidores, procedentes de diferentes puntos de la ciudad y de la provincia, algo que propiciaba "cierta sensación de inseguridad" para la ciudadanía.