El PP de El Puerto aprueba en solitario los presupuestos para 2024

Este martes se ha celebrado un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de El Puerto para la aprobación de los presupuestos municipales de 2024, unas cuentas muy esperadas ya que el equipo de gobierno aún estaba trabajando con los presupuestos prorrogados del ejercicio 2022.

Se trata de los segundos presupuestos elaborados por el Partido Popular, con unos ingresos previstos de 105 millones de euros y unos gastos estimados de 102 millones, situándose con el presupuesto consolidado (incluyendo a las empresas municipales) en 109 millones de euros de ingresos y 106 millones de gastos.

Tras la primera presentación del documento por parte del portavoz del equipo de Gobierno, Javier Bello, cada grupo municipal ha tenido una primera intervención de doce minutos y una segunda intervención de seis minutos, cerrando el turno de intervenciones el alcalde, Germán Beardo.

El documento es el primero que se realiza dentro del estatuto de Gran Población y contempla unas inversiones reales de 5,4 millones de euros, incluyendo 2,2 millones para la pasarela peatonal sobre el río Guadalete cuya obra se encuentra parada desde hace meses, y para la que se perdió la subvención europea concedida en su día, por lo que ahora tendrá que ser sufragada con fondos municipales.

Otras inversiones previstas son 159.331 euros para el proyecto del puente rodado a la altura de la Pescadería; 975.000 euros para mejorar el alumbrado público; 1,1 millones nde euros para la compra de vehículos del servicio de limpieza urbana; 388.468 euros para la primera fase de la rehabilitación del antiguo hospital San Juan de Dios; 16.500 euros para el centro residencial de personas sin hogar -se está pendiente de una subvención para acometer la obra, que se cifra en 350.000 euros-; 158.000 euros para renovar la tarima del pabellón deportivo Ramón Velázquez o 114.831 euros para la segunda fase de la rehabilitación del Hospitalito y su adecuación como Museo Municipal.

El documento también recoge el pago de dos millones de euros a la empresa Aqualia para compensar la ausencia de la subida de tasas en ejercicios anteriores.

IU: "Estos presupuestos son una mentira"

Para el portavoz de Izquierda Unida, José Luis Bueno, los presupuestos son "una mentira" ya que apenas tendrán una vigencia de un mes, ya que se aprobarían probablemente en noviembre una vez se resuelvan las alegaciones que se presenten. Para el portavoz de IU "este presupuesto recoge muchas de las cuestiones que no sehan hecho antes", refiriéndose también a las empresas municipales lamentando el medio millón de euros que se destinan a El Puerto Global, por un lado, y a Suvipuerto por otro, así como a los dos millones que se destinan a Apemsa. También puso sobre la mesa la situación de Impulsa, en concurso de acrredores, insistiendo en que la gestión de estas empresas municipales es "un desastre".

Unión Portuense pide que se bajen los impuestos

Por parte de Unión Portuense intervino su portavoz, Javier Botella, quien lamentó que al equipo de gobierno no le interese la participación, ni de los colectivos locales ni de los grupos de la oposición, ya que estas cuentas se han presentado con una total "opacidad". También negó que fueran, como se insiste desde el gobierno local, los presupuestos más altos de la historia, ya que como recordó en la sesión los de 2012 ascendieron a 108 millones de euros frente a los 102 del presupuesto para 2024.

No obstante, pidió que ante la mejora de los ingresos previstos se bajen los impuestos, en lugar de dejarlos como están. También echó en falta algunas partidas como mejoras en el estadio José del Cuvillo y lamentó un nuevo recorte de 500.000 euros en el área de Bienestar Social.

Vox lamenta la falta de documentación

Por parte del grupo Vox intervino el concejal José Antonio Gomila, quien dijo que en lugar de este presupuesto tardío se deberían estar presentando ahora los presupuestos para 2025, tal y como establece la normativa. También aludió a un informe de Intervención en el que se habla de falta de documentación, llegando a decir que "esto es un circo del que me siento un payaso", por la forma además de presentar los datos "propia del siglo pasado, con una gran falta de interés por informar de estas cuentas".

También lamentó que se reduzca el fondo de contigencia y el descenso en las inversiones con respecto al presupuesto de 2018, criticando sobre todo el destino de dos millones de euros a la pasarela tras haberse perdido la subvención europea para este fin. En cuanto a los impuestos, Gomila dijo que "o los ciudadanos pagamos de más o este gobierno no hace lo suficiente", advirtiendo de una posible indemnización de 16,5 millones de euros a los promotores del parking de Pozos Dulces por no habérseles permitido finalizar la obra.

El PSOE habla de "postsupuestos"

Los socialistas, por su parte, bautizaron estas cuentas como los "postsupuestos municipales", ya que como dijo su portavoz, Ángel González, "llega tarde y mal. Esperábamos un presupuesto valiente y vienen en su mayoría gastos de proyectos que ya se han hecho mediante modificaciones presupuestarias".

Lamentó además que el gobierno local no haya cumplido su promesa electoral de bajar los impuestos, destacando un descenso de 100.000 euros en las ayudas de emergencia social y la reducción del fondo de contingencia municipal, mientras asciende a 1,3 millones el presupuesto destinado a Fiestas.

González echó en falta además partidas destinadas a mejorar el transporte en autobús, la plaza de la Pescadería, las obras en la Jefatura de Policía Local o la reforma del Matadero Viejo, mientras se destinan 50.000 euros a la decoración de una rotonda.

En cuanto a la pasarela y el puente, recordó que la zona de la Bajamar está atravesando una situación caótica con las obras del tanque de tormentas.

Crece la ayuda a domicilio

Por su parte el portavoz del PP, Javier Bello, respondió a estas intervenciones aludiendo a la mejora económica de las arcas municipales, insistiendo en decir que es el presupuesto más alto de la historia -lo que no es cierto- y destacando mejoras como la del servicio de ayuda a domicilio, en el ámbito social, haciendo gala de la mayoría absoluta del PP para decir que estos presupuetos recogen los compromisos del Partido Popular.

Ya en la segunda ronda de intervenciones Izquierda Unida anunció alegaciones al documento, reivindicando inversiones como la reforma de la plaza de abastos o el arreglo de la Fundación Alberti, así como una mayor política animalista; por Unión Portuense intervino el concejal Francisco Belaustegui, quien acusó al gobierno local de maquillar los recortes en Bienestar Social, reclamando el cambio de ordenanza para las ayudas de emergencia, ya que la actual está obsoleta; José Antonio Gomila, de Vox, advirtió que "la realidad no puede encubrir, poque tarde o temprano sale a la luz", insistiendo en la necesidad de bajar el IBI y el impuesto de vehículos; y el PSOE aludió a la situacion de Impulsa y a gastos que se siguen produciendo como el canon de 87.000 euros que se paga a la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC) por los terrenos de La Puntilla, recordando que cuando el tripartito llegó al gobierno en 2015 se encontró una enorme deuda que había dejado el Partido Popular.

Diez millones para comprar fincas destinadas al alquiler

El encargado de cerrar la sesión fue el alcalde, Germán Beardo, quien atacó al gobierno central por el techo de gasto y acusó a la oposición de "falta de autocrítica", recordando que tras los recortes en todos los servicios es ahora cuando se van a ir dotando de una forma adecuada. Sobre la pasarela, dijo no tener la culpa de la quiebra de la empresa adjudicataria de las obras, mientras sacó pecha del plan de arreglo de los colegios públicos de la ciudad y del traslado del Museo municipal.

También recordó que el Ayuntamiento va a destinar diez millones de euros a la compra de inmuebles para habilitar alquileres asequibles, y finalmente agradeció la labor del equipo técnico que ha colabordo en la elaboración de los presupuestos.

El PP votó en solitario a favor de estas cuentas, votando en contra el resto de los grupos.