Los técnicos consideran que el colegio El Vaporcito podría encontrarse en estado ruinoso

El Puerto / Infraestructuras educativas

Urbanismo elabora un informe que se presentará ante la delegación territorial de Educación para instar a la Junta de Andalucía a buscar una alternativa en caso necesario

La prioridad de la concejala Lola Campos será garantizar la seguridad de los niños

El colegio El Vaporcito, situado en la calle Durango.
El colegio El Vaporcito, situado en la calle Durango.

El centro de Educación Infantil El Vaporcito podría encontrarse en estado ruinoso o al menos uno de sus edificios. Esa es la opinión que han expresado los técnicos de Arquitectura y Edificación de la Concejalía de Urbanismo a la concejala de Educación, Lola Campos, después de trasladarse este pasado lunes a dicho centro para inspeccionar sus instalaciones.

La visita se realizó con carácter de urgencia, ya que en estos días y debido al fuerte viento de Levante se había levantado la cubierta de uno de los dos edificios que forman este complejo educativo de titularidad pública (pertenece a la Junta de Andalucía), y situado en una manzana de la zona alta de El Puerto, conformada por las calles Durango, Santa Fe y San Sebastián. En estas semanas previas se tuvieron que personar en el lugar los Bomberos para intervenir sobre la techumbre, de tela asfáltica y que amenazaba con salir volando.

Ante ello, la Concejalía de Educación había trasladado aviso a Urbanismo para repararla, y la edil Lola Campos acompañó en la visita a los técnicos, con el objetivo de hacer una valoración de daños y proceder a su arreglo. La escuela infantil se compone de dos edificios, separados por el patio de recreo que da acceso a ambos inmuebles.

No obstante, lo que parecía en principio una cuestión menor que podría haber solventado el Ayuntamiento con un arreglo más o menos sencillo, resultó, al menos en una valoración inicial, un desperfecto de mayor calado, toda vez que al inspeccionar el edificio cuya cubierta se había desprendido, el más pegado a la calle Santa Fe, y comprobar las grietas que presenta, los técnicos municipales determinaron que dicha edificación se encuentra en estado ruinoso.

Se trata de un diagnóstico en el que pesan los antecedentes, ya que este edificio (que alberga al menos un aula) fue objeto hace 10 años de obras para reforzar su estructura, realizándose una reforma que, transcurrido el tiempo, no habría sido suficiente para que pueda ofrecer plenas garantías de seguridad a los niños y usuarios de este centro de enseñanza.

Los técnicos municipales están realizando un informe para determinar el alcance de los desperfectos. Una vea que está redactado, será remitido a la Concejalía de Educación, que a su vez lo trasladará a la Delegación Territorial de Cádiz, para que adopte una decisión sobre el centro, que podría pasar incluso por el cierre, en caso de que el edificio presente deficiencias que no garanticen la seguridad de los niños.

La concejala de Educación, que ayer mantuvo una reunión con el delegado territorial de Educación, Deportes e Igualdad, Miguel Andreu, le informó sobre la situación, y subrayó que el criterio del Ayuntamiento es que "por encima de todo se deberá mirar por la seguridad de los niños", y que si se confirman problemas estructurales "deberá ser la Junta de Andalucía quien decida, ya que excede de nuestras competencias, que son el mantenimiento del centro, obras de menor cuantía". Pero desde luego si hay peligro para los alumnos, Lola Campos "no permitirá que haya clases en el edificio", y plantea como posible alternativa el traslado a un colegio cercano, que podría ser el Cristóbal Colón. "Mi opinión es que si hay informes técnicos que digan que el edificio es ruinoso, no voy a apoyar que se queden los niños en el centro. Nuestro criterio va a ser garantizar la seguridad de los niños", insistió.

En el colegio de Educación Infantil El Vaporcito hay tan sólo tres clases. Este lunes concluyó el plazo de matriculación. La ratio es 25 alumnos por cada clase, pero en primero se han matricularon tan sólo 16 niños.

Como medida preventiva y a la espera del informe técnico, con los techos aún sin reparar, se ha procedido a la retirada de material escolar y muebles que había en el interior de edificio afectado, que se ha llevado a la edificación de enfrente para preservarlo de la lluvia, el sol o cualquier desprendimiento. Existe por lo tanto incertidumbre sobre el futuro de este centro de enseñanza, que al parecer en su momento se construyó sobre un tipo de arcillas expansivas que no ofrecen suficiente apoyo a la cimentación.

stats