El Gobierno cree que corresponde al próximo Ejecutivo prorrogar los presupuestos
El Ejecutivo responde así a la petición del PP de que el Consejo de ministros apruebe el decreto para que las CCAA tengan las directrices necesarias para elaborar sus propias cuentas para 2012.
El Gobierno cree que será tarea del Ejecutivo que se forme tras las elecciones del 20 de noviembre aprobar el real decreto de prórroga de los Presupuestos generales del Estado, ya que, según sus cálculos, el nuevo gabinete estará operativo antes de que concluya el año.
Fuentes del Ejecutivo han respondido así a la petición del PP de que el Consejo de ministros apruebe el decreto sin tardanza para que las comunidades autónomas tengan las directrices necesarias para elaborar sus propias cuentas para 2012.
Ese decreto, además de prorrogar las cuentas vigentes, suele incluir medidas urgentes para garantizar, por ejemplo, el poder adquisitivo de pensionistas y funcionarios en el ejercicio siguiente. Así se hizo en 1995, cuando el PSOE no consiguió sacar adelante las cuentas para 1996 -las elecciones generales se celebraban en marzo de ese año- y tuvo que prorrogar los presupuestos a través de un decreto ley.
El Consejo de ministros lo aprobó el 28 de diciembre y se publicó en el Boletín Oficial del Estado el 30 de diciembre, con lo que ya estaba en vigor al inicio del año siguiente. A falta de conocer el decreto de disolución de las Cortes y de la convocatoria electoral, que se aprobará el lunes, las fuentes del Ejecutivo calculan que el debate de investidura podría celebrarse en torno al 20 de diciembre, de manera que el nuevo gabinete tendría margen para tomar la decisión presupuestaria.
Para estas fuentes no sería lógico que el Gobierno saliente marcara el terreno al nuevo Ejecutivo.
Desde el PP se reclama no obstante el decreto de prórroga, aunque algunos diputados veteranos reconocen ser conscientes de que el nuevo Ejecutivo tendría que aprobar una nueva ley presupuestaria, basada en previsiones "realistas", para que la economía española genere confianza en los mercados. Según estas fuentes, esa norma y la ley orgánica que debe desarrollar la reforma que ha fijado en la Constitución la estabilidad presupuestaria, deberían ser las primeras leyes del nuevo gabinete.