Las Claves
Pilar Cernuda
La corrupción acecha a La Moncloa
Algunos diputados del PSOE que defienden el no a Mariano Rajoy se han mostrado dispuestos a abstenerse en la segunda votación a cambio de que la dirección del grupo parlamentario acepte que no sea una abstención en bloque, sino de solo los once precisos para que salga adelante la investidura. Esta propuesta la ha formulado el diputado valenciano José Luis Ábalos durante la reunión a puerta cerrada que ha mantenido el grupo socialista en el Congreso con el portavoz de la gestora, Mario Jiménez, quien, no obstante, se ha mostrado inflexible ante la posibilidad de una abstención mínima.
Jiménez, en una "contundente" intervención, según algunos de los presentes en la reunión, ha comunicado el mandato del Comité Federal y ha hecho hincapié en que "todos" los diputados socialistas deben acatar la resolución. Aunque Ábalos ha sido el portavoz de esa idea, otros diputados han confirmado a EFE que estarían por la labor de secundarla. "Lo vamos a seguir intentando hasta el final", ha dicho al término de la reunión la diputada por Baleares Sofía Hernanz, una de las parlamentarias que podría romper la disciplina de voto.
Navarro no es partidaria de "la mano dura"
La presidenta del PSOE, Micaela Navarro, ha dicho no ser "partidaria" de aplicar la "mano dura" con los diputados díscolos del PSOE que incumplan la disciplina de voto y no se abstengan en la segunda votación de investidura del candidato del PP, Mariano Rajoy. "No soy partidaria, posiblemente soy de las personas que más le gusta el diálogo y el consenso y de arreglar las cosas desde esta perspectiva", ha asegurado Navarro a la entrada de la Mesa del Congreso.
No obstante, ha asegurado que todos los diputados socialistas deben ser "conscientes" de cuáles son las normas y las reglas que les obligan como parlamentarios del partido, una vez que el Comité Federal votó y decidió abstenerse en la investidura. "Cuando se vota se vota y cuando hay una mayoría que ha decidido algo que no compartes, hay que acatarlo", ha advertido.Sobre la posición del PSC, que ha decidido también mantener el "no" a Rajoy, ha recordado que el partido catalán tiene sus propios estatutos, pero también participó de la decisión del Comité Federal y, como el resto, debería respetarla.
En cualquier caso, ha expresado su plena confianza en la decisión que pueda adoptar la gestora para atajar la disidencia interna, de forma que el grupo parlamentario se pueda poner a trabajar por los ciudadanos "en lugar de hablar de nosotros mismos".
La gestora cierra la puerta a la abstención mínima: "El debate está cerrado"
El portavoz de la gestora del PSOE, Mario Jiménez, ha asegurado hoy que el debate sobre la abstención mínima que plantean algunos diputados socialistas partidarios del no a Mariano Rajoy "está cerrado" y no existe posibilidad de que pueda haber un cambio de postura. Jiménez ha insistido en que todos los diputados, también los del PSC, tendrán que acatar la resolución del Comité Federal de abstenerse en la segunda votación de la investidura de Rajoy para desbloquear la formación de gobierno.
"El debate terminó el domingo. El Comité Federal aprobó un mandato que establece claramente que el grupo socialista votará no mañana y se abstendrá 48 horas después. Ese debate se cerró en ese momento y corresponde al conjunto de los integrantes del grupo llevarlo a la práctica con su voto", ha zanjado Jiménez en declaraciones en Onda Cero. Jiménez ha expuesto esta postura después de participar en la reunión a puerta cerrada del grupo socialista en la que varios diputados han defendido la vía de la abstención mínima de once parlamentarios para que el resto de los 84 integrantes pueda votar no a Rajoy. Preguntado si podrían imponer sanciones a quienes rompan la disciplina de voto, Jiménez ha insistido: "Confiamos que el conjunto de los miembros del grupo van a llevar a efecto el mandato del Comité Federal".
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