Tragsatec dice que la ex de Ábalos fue contratada con un 7 entre 177 candidatos

Jessica Rodríguez, la ex pareja del ex ministro de Transportes José Luis Ábalos, consiguió la plaza convocada en Tragsatec para cubrir una vacante tras presentarse 177 candidatos, de los que sólo 9 cumplían los requisitos exigidos, y obtuvo finalmente una puntuación de 7 sobre 10.

Así lo asegura el informe que Tragsatec remitió este viernes al juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente sobre el proceso de selección en la vacante convocada en la filial de Tragsa y que finalmente fue adjudicada a la ex pareja de Ábalos, que fue adscrita a la Presidencia de Adif y que esta segunda empresa avaló su trabajo.

El informe señala que el 22 de diciembre de 2020 se convocaron diez vacantes para puestos de trabajo administrativo, a los que concurrieron 929 personas. Para una de las vacantes, la que finalmente ocupó Jessica Rodríguez, concursaron 177, de las que sólo 9 “cumplieron con los requisitos imprescindibles, según las respuestas dadas al cuestionario de inscripción, y superaron la fase de valoración de méritos”. De esas 9, sólo dos, entre ellas Rodríguez, “superaron las fases de valoración técnica”.

En la fase de méritos, la mujer obtuvo 45 puntos sobre 45, en tanto que en la competencial 7 sobre un máximo de 10.

Asimismo, el informe señala que en el contrato de trabajo la labor encomendada a Rodríguez fueron, “de acuerdo con su titulación”, el refuerzo y apoyo en tareas administrativas de análisis, control y tramitación de documentación administrativa”, así como “manejo de aplicaciones de gestión documental y gestión contable, encontrándose la trabajadora adscrita a la Presidencia de Adif”.

El informe incorpora el currículum de la mujer, que indicaba que su domicilio estaba en la Plaza de España de Madrid, en el piso que presuntamente pagaba la trama, y en el que sostenía que había desempeñado labores de auxiliar administrativa en Ineco, mientras que ante el Tribunal Supremo sostuvo que cobró de esa empresa, pero nunca fue a trabajar, y que “no tenía ningún interés en el trabajo”, que aceptó por indicación de Ábalo. Aseguró, asimismo, que Ineco, aunque sí fichó y cobró -unos mil euros mensuales-, no llegó a trabajar. En Tragsatec tampoco realizó trabajo alguno, ni sabía donde estaba la oficina, confesó al juez.

En paralelo, el empresario y presunto conseguidor del caso Koldo, Víctor de Aldama, ha pedido al Supremo un permiso para ir a un “curso de retiro” en Portugal en Semana Santa, del 17 al 20 de abril. La defensa detalla una reserva para acudir a un retiro en la Academia Hielo y Amor, donde se ofrecen inmersiones en hielo, meditación, respiración o ayuno.