El avance de la recuperación de Raphael de cara a las actuaciones previstas para este año

Raphael sigue el tratamiento para eliminar el linfoma cerebral que se le detectó en diciembre. Tal como ha venido comunicando la familia el cantante linarense está siendo "muy buen paciente" y está reaccionado bien al duro tratamiento, que recibe en su domicilio y el ímpetu por volver a los escenarios, a estar con su público, le hace avanzar con mucho optimismo. La actuación prevista en el Wizink, cancelada apenas una semana antes, debido a su ingreso, fue una difícil aceptación, cuando esa aparición navideña iba a ser multitudinaria, con nuevo disco publicado además.

La revista Diez Minutos de esta semana ofrece unas fotos esperanzadoras: en plena recuperación Raphael ha sido visto acudiendo al logopeda, lo que revela un avance de cara a su regreso pleno. El artista, de 81 años, acompañado de su esposa, Natalia Figueroa, ha sido fotografiado cuando iba a visitar al terapeuta. El cantante va sin mascarilla, lo que también añade información de que el tratamiento está siendo un éxito.

La crisis de Raphael se produjo el pasado 17 de diciembre, durante la grabación del especial navideño de La Revuelta, con David Broncano. El artista comenzó a sentirse mal, muy aturdido, tras haber tenido lagunas en su entrevista en directo el día antes en El Hormiguero. Fue trasladado al Hospital Clínico San Carlos de Madrid y, posteriormente, al Hospital 12 de Octubre, donde fue intervenido hace 21 años de un trasplante de hígado, y permaneció ingresado durante diez días. Inicialmente, se especuló con la posibilidad de un ictus, pero tras exhaustivas pruebas a raíz de dicho trasplante, los médicos diagnosticaron un linfoma cerebral primario con dos nódulos en el hemisferio izquierdo, objeto de los síntomas neurológicos que presentó.

El anuncio del diagnóstico, comunicado oficialmente el 26 de diciembre por el hospital, generó una oleada de preocupación entre sus fans y el mundo del espectáculo. A su vez, con la tranquilidad mostrada por la familia, llegaban las buenas vibraciones respecto a la recuperación que inició de inmediato con el tratamiento. El 27 de diciembre el cantante recibió el alta hospitalaria y abandonó el centro médico acompañado de su esposa e hijos, mostrando una sonrisa que fue tranquilizadora.

Recluido en su domicilio, ha mantenido el ánimo alto, como han expresado sus hijos varones, Jacobo y Manuel Martos, en distintas apariciones, y tres meses después Raphael ha comenzado a salir a la calle para ir retomando poco a poco la actividad. Su concierto en Starlite, en Marbella, en julio, es el objetivo de regresar este verano a los escenarios y cumplir con los recitales aplazados.