Más de 300 agresiones a sanitarios en Cádiz: “Nos están masacrando y no se pone remedio”

Cádiz/El Sindicato de Enfermería Satse se ha unido a las concentraciones de condena convocadas el pasado miércoles en el centro de salud Benalup y este jueves en los centros de Los Gallos y La Banda, ambos de Chiclana, por las agresiones sufridas en los últimos días por profesionales del Distrito Bahía de Cádiz-La Janda.

Para el sindicato es muy preocupante el incremento de las agresiones a sanitarios del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Apuntan que se registraron 343 casos en nuestra provincia durante el año 2024, casi un 70% más que en 2023. Y la tendencia sigue en aumento para este año, a tenor de los últimos episodios violentos.

A juicio de Satse, "aunque se han conseguido avances en la prevención y protección de los profesionales sanitarios ante casos de agresiones en el desempeño de su actividad en los últimos años, los datos evidencian que es urgente seguir implementando nuevas medidas en esta materia".

“Ayer estuvimos en Benalup y hoy nos hemos concentrado en los dos centros de salud de Chiclana para condenar estas agresiones, pero también para reivindicar medidas eficaces de protección. También exigimos un cambio en la actual política de gestión de nuestro Distrito, con acciones para dar respuesta a los ciudadanos, que deben incluir el aumento de recursos tanto materiales como humanos. Los cierres de centros, la suspensión de agendas, los recortes de plantillas, la sobrecarga laboral, la deshumanización de la atención... influyen de manera directa en este aumento de agresiones y las direcciones de los centros son responsables de estas nefastas decisiones”, aseguran los representantes de Satse en el Distrito Bahía de Cádiz-La Janda.

“Las medidas que se están implementando son claramente insuficientes y es evidente que la mala gestión sanitaria y las políticas economicistas de la administración tienen relación directa con este aumento de casos”, alerta Satse. “Nos están masacrando y no se pone remedio para frenar esta lacra”, sentencian.

Según Satse, estas cifras son sólo una parte visible de este problema, casos que se denuncian y que llegan a hacerse públicos, pero son muchas las agresiones que enfermeras, enfermeros, fisioterapeutas y otros profesionales sanitarios dejan sin denunciar y, por tanto, no pueden cuantificarse oficialmente.

Para el Sindicato de Enfermería es urgente seguir implementando medidas preventivas y disuasorias para evitar las agresiones. Exige así la presencia de vigilantes de seguridad en todos los centros de salud, una petición que se ha reclamado en numerosas ocasiones sin respuesta por parte de la dirección del Distrito Bahía-jadna.

Por último, el sindcato recuerda a la ciudadanía que los profesionales sanitarios no son responsables de las deficiencias del sistema, al contrario, son a menudo víctimas del deterioro de la sanidadpPública y están haciendo todo lo posible para que esto no repercuta en la atención y cuidados. Por ello, el Sindicato de Enfermería apela a mantener una relación de respeto y confianza entre profesionales, pacientes y familiares.