Airbus pacta un nuevo ERTE en Puerto Real hasta el 31 de mayo de 2021

La dirección de Airbus ha alcanzado este viernes un preacuerdo con la mayoría de los representantes de sus trabajadores para aplicar un nuevo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) en su división de Operaciones, especializada en la construcción de aviones civiles y en la que se encuadra la planta de Puerto Real, según han confirmado fuentes sindicales. Este ERTE será el segundo desde el estallido de la pandemia de coronavirus y permitirá a la compañía amortiguar el impacto de la crisis económica y mantener los empleos a la espera de una posible mejoría del negocio.

El expediente afectará al 92% de la plantilla de la división de Operaciones en España, lo que supone un total de 3.266 trabajadores, mientras que el 8% restante estará exento del ERTE por encontrarse "en tránsito a la jubilación parcial", según las mismas fuentes. El ERTE entrará en vigor el próximo 23 de noviembre y se aplicará hasta el 31 de mayo de 2021.

En cuanto a su distribución por centros de trabajo, en el caso de Puerto Real afectará a 386 trabajadores, mientras que en Getafe (Madrid) serán 2.087 y en Illescas (Toledo) 793. El preacuerdo contempla la retribución de vacaciones, pagas extra y pluses.

Durante los 116 días laborables en los que estará en vigor el ERTE, los trabajadores del área de producción de Puerto Real pararán 58 días, mientras que en el resto de áreas se dejará de trabajar 22 días. En las jornadas en las que el trabajador se encuentre en ERTE, percibirá un importe equivalente al 70% del salario bruto más su antigüedad.

CCOO ha abierto un periodo de consultas con sus afiliados hasta este martes para ratificar este preacuerdo. La valoración de este sindicato es "sumamente positiva por cuanto supone proteger a los trabajadores de las consecuencias económicas e industriales para el transporte aéreo y, por ende para Airbus, que está ocasionando la pandemia de la Covid-19, siendo la aplicación de ERTES a largo plazo una de las palancas para salvaguardar el empleo al tiempo que se asegura la recuperación industrial".

Este ERTE será el segundo que aplique la compañía en Puerto Real después de la suspensión de contratos aprobada el pasado mes de mayo y que estuvo en vigor hasta el pasado 30 de septiembre. Durante el mes de octubre, Puerto Real ha recurrido a las medidas de flexibilidad contempladas en el convenio colectivo como la bolsa de horas –jornadas de trabajo que se deben recuperar más adelante– para mantener la reducción de producción durante el periodo de negociación del ERTE.

En la otra factoría del grupo en la provincia, el CBC de El Puerto, adscrita a la división de Defensa y Espacio, ya se aplica un ERTE desde el pasado 1 de noviembre que estará en vigor hasta el 31 de diciembre de 2021, siendo la única planta del negocio militar en España en la que se ha contemplado la suspensión de contratos.

Una vez cerrada la negociación de los ERTE, los sindicatos prevén ahora sentarse en la mesa con la compañía para abordar su plan industrial para España. Tanto CCOO como UGT han desvelado ya las propuestas que llevarán a la palestra. Ambos sindicatos exigen el mantenimiento del empleo y de las capacidad industrial de Airbus en España, rechazando la posibilidad del cierre o venta de plantas.

Los comités de las factorías gaditanas ya han expresado su preocupación por la “campaña de presión interna y externa” a favor de una posible venta de sus instalaciones a un tercero, según un comunicado conjunto emitido a finales de octubre, en el que incidieron en que “es evidente que el objetivo que se persigue es intoxicar y generar un clima favorable hacia las posiciones de la Dirección Central.

La alerta surgió a raíz de la publicación de que Airbus baraja aliviar su estructura en España aprovechando una posible de integración de sus tres grandes proveedores de componentes de aeroestructuras en España –Aciturri, Alestis y Aernnova–, a las que traspasaría sus dos factorías de la provincia de Cádiz.

Cabe recordar que el presidente de Airbus Operaciones en España, Manuel Huertas, admitió el pasado mes de julio que la factoría de Puerto Real es la que se encuentra en una situación “más crítica” ya que la crisis del sector ha estallado cuando estaba en plena digestión del fin del programa del A380.

Ante la falta de demanda de aviones, la compañía ha reducido en un tercio el ritmo de fabricación del A320, A330 y A350, programas en los que participa la factoría de Puerto Real y buena parte de la industria auxiliar aeronáutica de la Bahía de Cádiz.

El CBC se encuentra en una situación complicada por la crisis que afecta tanto al negocio militar como al civil de Airbus. Aunque la factoría está adscrita nominalmente a la división de Defensa, la mayor parte de su carga de trabajo depende de programas civiles, como el A320. A ello se suma que el CBC era subcontratista de Boeing en el programa del 737MAX, paralizado desde finales del año pasado como consecuencia de dos graves accidentes aéreos, y las dificultades que ha encontrado Airbus para exportar el A400M.