Alcedo y Montemayor Laynez minimizan su papel en Coanda

Antonio Alcedo y Montemayor Laynez, durante años hombres de confianza de Lorenzo Sánchez en el gobierno roteño, también declararon ayer en el juicio del caso Uniformes por su vinculación con Coanda, aunque ambos minimizaron sus responsabilidades en esta cooperativa.

Alcedo, por ejemplo, explicó que fue socio fundador de la misma en el año 1984 pero que en ningún momento asumió funciones ejecutivas. Y argumentó que se apartó de Coanda en 1991, cuando decidió buscar otros horizontes profesionales. Sin embargo, se mantuvo durante años como presidente del consejo rector de Coanda, aunque explicó que se trataba simplemente de un "cargo honorífico". "Me limitaba a firmar las liquidaciones anuales de la cooperativa ante el notario pero poco más", indicó antes de enfatizar que de Coanda "jamás cobré nada porque esa cooperativa no daba beneficios".

Como concejal algunas veces aprobó contratos a esta cooperativa, algo que no le llamó la atención "porque ni el secretario ni el interventor ponían reparos".

Por su parte, Montemayor Laynez, también ex concejal de Roteños Unidos, explicó que era apoderada de Coanda desde 1991, que luego ejerció como secretaria de esta firma comercial y que "por desconocimiento" no reflejó este hecho en su declaración de bienes cuando debutó como edil en 2003, aunque sí lo hizo cuatro años después.

Laynez desembocaría luego en la empresa Epis Rotasur que fundaran Lorenzo Sánchez y su esposa, aunque aseguró que rompió toda vinculación en 2009, cuando pasó a tener dedicación exclusiva en el Ayuntamiento.

Tanto Antonio Alcedo como Montemayor Laynez dijeron ayer ante el tribunal que no se acordaban de los motivos por los que, según consta en las actas, abandonaban las reuniones de las comisiones de gobierno en las que se aprobaban contratos municipales en beneficio o bien de Coanda o bien de Epis Rotasur.