Tribuna Económica
Joaquín Aurioles
Inventarios de diciembre (4). Desigualdad
Alestis ha agradecido "la cooperación de los comités de empresa y demás interlocutores sociales" para cerrar el acuerdo sobre el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que "es beneficioso para ambas partes". La medida ha sido ratificada por la plantilla en una consulta celebrada este martes y se aplicará entre el 1 de junio y el 30 de septiembre.
La compañía sostiene que durante el proceso de negociación "ha primado la mejora de las condiciones económicas de los trabajadores más afectados por el procedimiento de suspensión de contratos de trabajo". La suspensión de contratos supone " el primer paso para afrontar la situación y responder a las necesidades reportadas por los clientes para los próximos meses".
"A medida que la demanda se modifique o se confirme, plantearemos las propuestas que consideremos necesarias para adaptar la capacidad productiva de la compañía a las necesidades del mercado, con el único objetivo de mantener el mayor número de puestos de trabajo, recuperar la senda del crecimiento y creación de empleo, y hacer sostenible el proyecto industrial de Alestis a largo plazo", ha indicado la empresa en un comunicado.
El ERTE por causas productivas afectará a la plantilla de todos los centros de trabajo desde el 1 de junio al 30 de septiembre. En las dos plantas de la Bahía un total de 472 empleados participaron en la consulta, de los que 421 emitieron un voto a favor. En el conjunto del grupo, se registraron 910 sufragios favorables al acuerdo y 142 negativos, la mayor parte de ellos en la planta de Vitoria, que ha sido la única en la que ganó el no, según han indicado fuentes sindicales.
La suspensión de contratos se realizará rotatoria de forma quincenal con una afectación máxima de 50 jornadas, salvo en la última semana de agosto, en la que entrará el 100% de la plantilla. En concreto, el 80% de los empleados de Mano de Obra Directa (MOD), lo que supone 698 trabajadores sobre un total de 872, entrarán en esta rotación, según el preacuerdo.
En cuanto a la Mano de Obra Indirecta (MOI), el 100% de los empleados del departamento de ingeniería entrarán en el ERTE (69 trabajadores), mientras que en lo que se refiere al personal de Estructura y Plantas, que cuenta con 393 trabajadores, el 40% estará exento (unos 157 operarios), mientras que el 45% entrará en una rotación quincenal equitativa y el 15% verá suspendido su contrato durante toda el periodo de vigencia del ERTE.
La empresa plantea una compensación del 25% de la paga extraordinaria para cada trabajador afectado por el ERTE y otros 500 euros lineales para la plantilla MOI que verá suspendido su contrato entre el 1 de junio y el 30 de septiembre.
El ERTE de Alestis coincide en el tiempo con el de la división comercial de Airbus, que también abarca hasta el 30 de septiembre. La compañía controlada por el grupo Aciturri inició las negociaciones con los sindicatos la semana pasada tras anunciar un ERTE para todos sus centros de trabajo, incluidas las plantas de El Puerto y Puerto Real, por el impacto en su negocio de "la drástica reducción del tráfico aéreo y la cancelación de pedidos por parte de las aerolíneas" a consecuencia de la crisis del coronavirus.
El ERTE en Alestis se suma a otros expedientes similares que ha ido presentando Aciturri en diferentes, filiales, el último de ellos, este lunes, que afecta a una planta en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) de su división Assembly.
Alestis es un proveedor de primer nivel (Tier-1) de aeroestructuras, líder en ingeniería y tecnologías de fabricación de materiales compuestos, que participa en los programas más relevantes de los mayores fabricantes del sector como son Airbus, Boeing o Embraer. El grupo desarrolla proyectos de ingeniería, diseño, desarrollo, fabricación y soporte de producto de aeroestructuras complejas. Cuenta con más de 1300 empleados repartidos en sus centros de trabajo ubicados en Sevilla, Getafe, Puerto Real, Puerto de Santa María y Vitoria, a los que se suman las instalaciones de Sao José dos Campos, en Brasil.
Alestis fue adquirida el año pasado por Aciturri tras un largo proceso de reestructuración en el que llegó a declarar en concurso de acreedores, por lo que Airbus se vio obligada a rescatarla para evitar retrasos en algunos de sus programas.
Aciturri tomó el 62% que tenía Airbus en la empresa y el 14% de Unicaja, con lo que se convirtió en accionista mayoritario con el 76%. El resto de los títulos, el 24%, siguieron en manos de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que ha decidido mantener su participación en Alestis por razones estratégicas.
La primera medida, inmediata tras el cambio accionarial, fue la inyección de 80 millones de euros en la empresa, 51,9 de forma directa y el resto a través de una ampliación de capital proporcional al peso de los dos accionistas: 21,3 millones en el caso de Aciturri y 6,7 en el de la SEPI,
Pero el problema estriba en que Alestis necesita generar más caja para devolver la deuda cuyo vencimiento se aplazó dentro del convenio firmado con sus acreedores hace siete años. El monto total de este pasivo asciende a 284 millones de euros, aunque el primer plazo es el de mayor cuantía, 170 millones de euros, y tiene que ser satisfecho en 2021, por lo que la crisis del coronavirus no ha podido en llegar en peor momento para la empresa.
Precisamente, esta espada de Damocles es la que explica que Alestis siga teniendo una estructura jurídica propia, ya que así Aciturri defiende su balance de los problemas del que fuera el emblema del sector aeronáutico andaluz.
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