Armada: El estreno de una nueva escuadrilla en la Base de Rota

Rota/En el hangar que todavía ocupa en parte la Tercera Escuadrilla de la Flotilla de Aeronaves, dos Airbus H-135 lucen recién estrenados para iniciar los primeros vuelos de la nueva Duodécima. Aún comparten instalaciones con los veteranos AB-212 pero se prevé que causen baja en el próximo verano, siguiendo el proceso de renovación del arma aérea de la Armada, que espera hasta tres nuevos tipos de helicópteros en los próximos dos años.

El capitán de fragata Domingo Blanco Díez, comandante de esta flamante unidad, destaca el trabajo que está realizando su equipo para ponerla en marcha. “Basta con entrar en el hangar para darse cuenta de la ilusión con la que toda la escuadrilla afronta los retos de una dotación de quilla”, explica. Un total de 40 profesionales forman la Duodécima, la gran mayoría procedentes de la Sexta, cuyos últimos Hugues H-500 se ‘jubilaron’ el pasado verano tras más de 80.000 horas de vuelo totales. Blanco Diez, entre otros destinos, ha estado 17 años en esa misma escuadrilla, tres años en la Oficina de Programa NH90, “donde pude volar el NH90”, y otros tres años en la Jefatura de Apoyo Logístico desempeñando destinos siempre relacionados con las aeronaves.

Desde abril se enfrenta con “responsabilidad y satisfacción” a este reto, que marcó un hito con la llegada la semana pasada de las aeronaves a la Base de Rota. “Ahora toca continuar trabajando para operar a bordo de los buques de la Armada, focalizándonos en terminar la formación de pilotos y mantenedores y en febrero comenzaremos la campaña de calificación inicial en buques, que es el siguiente hito que afrontaremos”, cuenta. “A partir de ahora es cuando hay que estar más atentos y realizar todas las actividades relativas a los vuelos bajo la premisa irrenunciable de la seguridad de vuelo, pilar fundamental para que nuestras dotaciones de vuelo regresen a salvo a casa”.

Y en eso están cuando Diario de Cádiz visita sus instalaciones, el hangar más moderno con el que cuenta la Base de Rota hasta que llegue próximamente el que alojará a los NH-90 – “solamente han sido necesarias unas pequeñas obras de adaptación para el despliegue de redes informáticas y adecuación de oficinas”-. Allí, el día a día de la dotación de quilla es “un camino con altos y bajos” y “con pasos pequeños y firmes, va avanzando hacía el objetivo de alcanzar la IOC (Capacidad Operativa Inicial)”, que en su caso será ”poder comenzar a operar como unidad aérea embarcada, esto es, desplegar nuestros helicópteros a bordo de buques de la Flota”. Porque “crear una nueva escuadrilla es un ejercicio de adaptabilidad y flexibilidad por parte de muchas personas con el objetivo de volar una aeronave nueva manteniendo los mismos estándares de calidad y seguridad que caracterizan a la Armada”, cuenta.

Lo que aportarán estos helicópteros a la Armada

Pero, ¿que aportarán los Airbus H135 a la Flotilla de Aeronaves de la Armada que no tenía? Pues “con los H135 aportaremos unidades áreas embarcadas que pueden operar día y noche, con un personal reducido y a un bajo coste. No es posible olvidar que actualmente el H135 P3H es el mejor helicóptero relación capacidades/costes del mundo”, apunta. “Por supuesto, mantendremos nuestra misión de formación, en la que nuestro querido H-500 se había quedado un poco anticuado, algo lógico si consideramos que esos helicópteros llegaron a la Armada entre 1972 y 1977”. Y por último, prosigue, “es de destacar que con el H135, y por primera vez en la Armada, se dispondrá de un contrato de adquisición de repuestos basado en las prestaciones, con el que se busca un ahorro de costes y una mayor disponibilidad durante toda la vida de la aeronave”.

Las misiones asignadas, inicialmente, son como helicóptero de enseñanza y de apoyo. “Pero nuestra primera misión ahora es superar la EVALO (Evaluación Operativa) y alcanzar esa IOC (Capacidad Operativa Inicial) que citaba antes". Durante el segundo semestre de 2024 está previsto el primer destacamento experimental (UNADEST) a la Escuela Naval Militar, y la primera unidad aérea embarcada (UNAEMB) experimental también se hará para completar a esa evaluación a bordo de buques. "Si los planes evolucionan según esperamos, antes de que acabe 2024 deberíamos alcanzar esa IOC, y a partir de ese momento estaremos en disposición de desplegar operativamente, en las misiones que la Flota nos asigne”.

En referencia a las misiones embarcadas, los diferentes kits de misión de los que se dispone permiten a esta aeronave realizar misiones logísticas; de búsqueda y rescate (SAR); de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR); y evacuaciones médicas (MEDEVAC). “Somos además conscientes de que el helicóptero H135 P3H es una aeronave en crecimiento, y nos consta que Airbus sigue trabajando en ofrecer nuevos kits modulares de misión, con los que poder aumentar las capacidades que nuestra Escuadrilla puede poner a disposición”.

"Las habilidades de pilotaje hay que mantenerlas"

Y desde que el día 11 de diciembre los helicópteros llegaron a la base naval toca volar y volar, adaptándose a las novedades de este aparato. Explican desde el equipo que "la digitalización de las aeronaves durante los últimos veinte años ha producido que no haya sólo que volar, si no que se requiera demás de una gestión del vuelo interactuando con los diferentes ordenadores del helicóptero". Es cierto que "las aeronaves actuales tienen muchas más capacidades y automatismos que las anteriores, facilitando el vuelo, pero en nuestro ambiente naval tenemos que tomar y despegar de los barcos como hemos hecho siempre, por lo que las habilidades de pilotaje hay que mantenerlas”, añaden.

Durante 2024 está previsto recibir otros tres helicópteros, y en 2025 recibirán los dos últimos, que completarán el número total adquirido de siete para la Armada. “La producción de los H135 P3H es muy dinámica y se puede decir que es uno de los programas de adquisición de armamento y material donde no sólo no existen sobrecostes, sino que incluso se producen adelantos sobre las fechas programadas de entrega de unidades”.

Será el fin de un camino cuya preparación empezó hace ya tres años, “con los documentos de Necesidad Operativa, Requisitos de Estado Mayor y Viabilidad Técnica”. En el año 2021, se firmó el contrato de adquisición, que fue en este caso una adquisición conjunta por parte de la Dirección General de Armamento y Material (DGAM) de helicópteros H135 P3H, y luego vino la Directiva de Entrada en Servicio firmada por el Almirante Jefe de Estado Mayor de la Armada en enero de 2023. Es el momento de materializar todos los factores con el fin de operar el helicóptero y obtener la Capacidad Operativa Inicial, que está previsto alcancemos en el segundo semestre de 2024".

Ha sido un proceso de implicación de toda la Armada y que con estas aeronaves "supone un estimulante reto para la escuadrilla y, por extensión, para la Flotilla". "Se dispondrá ahora de una aeronave europea con diferencias respecto a las habituales aeronaves de procedencia americana empleadas por la Armada".