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Broncano
La fragata Canarias, desplegada en la Operación Atalanta, ha participado en la detención de varios piratas tras el ataque un buque mercante en Somalia, con intercambio de disparos entre el equipo de seguridad privada del buque mercante y el esquife de estos presuntos piratas.
Los hechos se produjeron el pasado viernes. Según apuntaron desde el cuartel general de la operación Atalanta, el buque mercante Christal Arctic, con bandera de las Islas Marshall, sufrió el acercamiento sospechoso sucedió a 100 NM al norte de Bosaso (Somalia), con intercambio de disparos entre el equipo de seguridad de el barco mercante y un esquife con presuntos piratas a bordo.
Después de que el ataque fuera repelido por el equipo de seguridad privada del buque mercante, uno de
los buques de guerra Atalanta que estaba en las inmediaciones fueron los primeros en intervenir y se hizo cargo de seis de los presuntos piratas, asegurando su integridad física integridad debido a la condición insegura de su esquife y tratando a algunos de ellos con lesiones de diversa gravedad. Las fotografías de la nota de prensa muestran a la fragata Canarias durante la intervención, con un equipo de la Fuerza de Guerra Naval Especial (FGNE) de la Infantería de Marina.
Tras un a investigación y reunión de pruebas, catalogando el ataque de piratería, la fragata se dirigió a Seychelles para futuras acciones y la resolución del proceso. Las Seychelles es una de las naciones en el Área de Operaciones con la que la Operación Atalanta tiene acuerdo legal que permite juzgar a presuntos piratas arrestados por buques de guerra de esta misión de la Unión Europea.
No es el primer suceso en el que tiene que intervenir la fragata española, con base en Rota, durante ese despliegue. Hace menos de un mes monotorizó el proceso y la situación que terminó con el fin a los 32 días de cautiverio de la tripulación del mercante Abdullah.
En el último año, la inestabilidad en la zona de operaciones ha crecido y estos grupos parecen que han despertado, coincidiendo con un momento de creciente inseguridad del tráfico marítimo, especialmente en el mar Rojo y el golfo de Adén, por los ataques de los rebeldes hutíes contra buques comerciales vinculados al conflicto en Israel.
La dotación de la Canarias, que partió de Rota en febrero, está formada por más de doscientos hombres y mujeres. A bordo, además hay una unidad de Infantería de Marina encargada de apoyar al buque en tareas de seguridad. Como medios aéreos, la fragata cuenta con un helicóptero de la quinta escuadrilla de aeronaves, un dron perteneciente a la undécima escuadrilla y un refuerzo de personal sanitario para tratar casos de urgencia médica a bordo.
En esta ocasión y por primera vez, el buque de la Armada cuenta con nuevos sistemas de defensa específicamente diseñados para hacer frente a las nuevas amenazas aéreas no tripuladas en la zona.
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