La Bahía de Cádiz marca dos años de mejora de calidad del aire
medio ambiente
La zona del Campo de Gibraltar aumentó, sin embargo, los valores de ozono troposférico en 2020
El área de la Bahía de Cádiz presentó durante 2020 una mejora sustancial en los valores de calidad del aire. Así lo confirma el informe anual elaborado por Ecologistas en Acción: un dato que sigue la inercia generalizada en la mayor parte de territorios, en los mínimos de la última década debido a la reducción de movilidad provocada por la pandemia. Otras zonas de la provincia, tradicionalmente altas en medidores como el ozono troposférico –un contaminante secundario, proveniente en su mayor parte del tráfico rodado, “viajero” y bastante habitual–, como Arcos y Los Alcornocales, presentaban, igualmente, valores de contaminación inferiores a los habituales. Así, la estación de medición de los Arcos pasaba de superar 144 días los límites aconsejados por la OMS en ozono troposférico según medición octohoraria, a hacerlo en 87 ocasiones: eso sí, a pesar de la notable mejora, la marca arcense se sitúa como la más alta de la provincia en este contaminante durante 2020. En la localidad aumentó también la concentración de partículas en suspensión PM10, que superó en 27 ocasiones los valores recomendados. La estación de Los Alcornocales, por su parte, vio disminuir la concentración de ozono troposférico en casi la mitad: de 60 a 33 jornadas pasaron la cantidad recomendada (100 microgramos). Siguiendo los registros de este contaminante, el marcador de la avenida Marconi, en la capital gaditana, pasó de 69 a 41 días de concentración alta; mientras que los medidores de la Cartuja y Chapín, en Jerez, arrojaron también descensos considerables: de 77 a 52 días el primero; de 104 a 67, el segundo.
La estación del Río San Pedro, en Puerto Real, bajó en más de treinta jornadas el índice de saturación por ozono: de 66 a 34. Pero la mayor disminución la marcó la el medidor de San Fernando, pasando de 77 a 32 jornadas por encima de los valores que dicta la OMS. Siguiendo estos mismos parámetros, la zona de la Bahía gaditana (considerada uno de los tres principales focos de contaminación urbana a nivel andaluz) computó hasta 34 jornadas menos de saturación por ozono que en el año anterior (de 79 en 2019 a 45 en 2020).
Estos buenos datos se suman a los del penúltimo ejercicio, que ya de por sí experimentaban una mejoría debido al verano de bajas temperaturas que se vivió en la zona 2019 (un factor que contribuye a mitigar la formación del ozono troposférico). Además, la mejoría de la calidad del aire por NO2 (dioxido de hidrógeno) fue máxima durante el primer estado de alarma (14 de marzo a 21 de junio del año pasado), alcanzando hasta un 43% menos en la Bahía de Cádiz.
El Campo de Gibraltar, sin embargo, presenta una excepción respecto a la generalización: la media de presencia de ozono troposférico en la zona aumentó, de hecho, en cinco jornadas, pasando de 33 a 41. Aunque la comarca cuenta con localidades, como Los Barrios, que marcaron notables descensos en estos valores –de 74 a 29 días, por ejemplo–, otros puntos como Cortijillo o Campamento vieron crecer considerablemente la presencia de este contaminante durante 2020: de 1 a 84 en el primer caso, de 8 a 83 días, el segundo.
La buena noticia la encontramos en esta zona en los valores de contaminación por dióxido de azufre, con casos como el de Campamento, de 28 a 0 días superando los 20 microgramos por metro cúbico en los que la OMS sitúa el máximo o, sobre todo, Puente Mayorga, pasando de 77 a tres días. Así, la media de jornadas con alta presencia de este óxido en la comarca pasó de trece a tan sólo dos durante 2020.
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