Defensa suma seis millones de m2 en desuso

La última oferta de la empresa José Manuel Pascual Pascual para crear un macroproyecto hotelero en la Bahía de Cádiz en suelo militar en desuso -a cambio de asumir la gestión del Hospital Naval de San Carlos de San Fernando- ha vuelto a reabrir el debate sobre las innumerables trabas y la cerrazón permanente del Ministerio de Defensa para desprenderse de un suelo que ya no le sirve para nada y por el que desde hace décadas viene suspirando una decena de municpios gaditanos.

Un informe oficial del Ministerio de Defensa fechado a mediados de 2010 cifraba en torno a los seis millones de metros cuadrados el total de terrenos de su propiedad que era susceptible de ser cedido, vendido o enajenado en la provincia. En los casi tres años que han transcurrido, pocas -y en la mayoría de los casos irrelevantes- han sido las cesiones de suelo realizadas por Defensa. Si acaso habría que destacar el convenio suscrito con el Ayuntamiento de Vejer tras la desafectación del antiguo VOR (un edificio para el control operativo de radio ya en desuso) y, más reciente, la devolución a Jerez del Depósito de Sementales. Y poco más. En muchas ciudades los munícipes se desgañitan sin éxito para que Defensa abra la mano y traspase ese suelo para el desarrollo urbano o industrial de sus localidades. Lo que sigue es una radiografía, municipio por municipio, de estas relaciones con Defensa.

CÁDIZ

El Ministerio de Defensa lleva cerca de 30 años 'haciendo caja' en la capital. A pesar de que buena parte de sus propiedades fueron sufragadas en su momento por los propios gaditanos (el cuartel de la Avenida lo construyó uno de los ayuntamientos de la II República como parte del pago por la recuperación de los terrenos de los glacis de la muralla... que en su momento fueron levantadas gracias a la aportación ciudadana), desde la llegada de los ayuntamiento democráticos, los distintos titulares de Defensa, ya fueran del PP o del PSOE, no han tenido empacho en obtener importantes plusvalías gracias a los convenios firmados con el Ayuntamiento de Cádiz.

Desde el primer convenio firmado con el alcalde socialista Carlos Díaz, en 1984, hasta el último cerrado con la alcaldesa popular Teófila Martínez, en 2011, el Ministerio de Defensa ha ingresado más de 30 millones de euros. Hay que tener en cuenta que sólo por la venta de los terrenos del antiguo acuartelamiento de Varela el Ministerio se endosó cerca de 2.000 millones de pesetas de la época, 1996-1998. Y a este suelo, el de mayor superficie de la ciudad donde el Ayuntamiento ha levantado un nuevo barrio y amplias zonas verdes, se le han ido uniendo ejemplos del rico patrimonio histórico de la ciudad: los castillos, bóvedas y baluartes de las murallas; los cuarteles del Parque de Varela, los terrenos de la Escuela de Tiro o la muralla de Cortadura y el Club Marte, lo último en retornar a la ciudad previo pago de casi dos millones. Antes se recuperó la espléndida sede del Gobierno Militar, hoy Centro Cultural Reina Sofía, del que el Ejército se llevó antes su rica biblioteca y archivo (con todos los planos originales de las fortificaciones de la ciudad, entre otras joyas).

Más allá, poco le queda a Defensa de su propiedad en la capital. Son intocables, según ha afirmado el Ministerio en varias ocasiones, la Base Naval de Puntales y el Polígono de Tiro de Torregorda (en la autovía a San Fernando) mientras que no es capaz de poner en el mercado, al pedir un precio excesivo, la antigua sede del Casino Militar, en plena calle Ancha.

SAN FERNANDO

El suelo militar en desuso en San Fernando ocupa una superficie cercana a los 565.000 metros cuadrados, entre el medio millón de los antiguos polvorines de Fadricas y los terrenos del antiguo polígono de tiro Janer. Durante años los planes para estos espacios han estado paralizados enredados en diversos procesos administrativos. Ahora, sin embargo, el desbloqueo parece haber terminado, aunque sin fecha para que su desarrollo se convierta en una realidad para beneficio de la ciudad. Caso aparte es la superficie que Defensa tiene en Camposoto, un enclave privilegiado en el Parque Natural y junto a la playa del Castillo que ronda los 1,5 millones de metros cuadrados y en el que el Ejército de Tierra ha reforzado su actividad en los últimos años. Ni siquiera se salvan los 340.000 metros cuadrados que recogía el protocolo de intenciones firmado entre el Ayuntamiento y el Ministerio en 2002 para la recuperación de éstos y los otros suelos mencionados.

Para los suelos de Janer hay un acuerdo entre el propietario, el Ministerio, y la Zona Franca desde hace unos años, aunque el precio ante la coyuntura económica ha bajado de 12 a 6,7 millones de euros. La intención es que se convierta en un parque empresarial, donde también pueda construirse un hotel, se ubique una estación de autobuses y albergue la tan necesaria subestación eléctrica (cuestión ya definida para la que se reservan 3.000 metros cuadrados). El largo proceso recorrido por el Plan General (PGOU) para la aprobación de su revisión influyó en el retraso de su desarrollo.

El desarrollo de los terrenos de los antiguos polvorines de Fadricas ha sufrido igualmente un dilatado trámite administrativo, y de hecho apenas ha avanzado unos pasos. Desde que en torno a 2007 el Ayuntamiento iniciara una reserva de suelo sobre esta superficie -que también repercutía en los suelos revertidos a la familia Vela de la Flor y otros propietarios menores-, numerosas han sido las desavenencias entre la Administración local y las autoridades de Defensa, que mostraron su malestar por la actuación municipal y bloquearon un posible acuerdo. Poco antes de las elecciones municipales de 2011 desde el Gobierno central se optó por aceptar un acuerdo de bases al que ya se habían adherido la práctica totalidad de los propietarios. Firmado en mayo de 2012 por Defensa, el Consistorio tiene ahora un plazo de tres años para redactar un plan de sectorización que permita su desarrollo.

EL PUERTO

En El Puerto, los terrenos de titularidad militar pendientes de reversión al municipio se sitúan en la Sierra de San Cristóbal, en concreto en la zona conocida como el Rancho de la Bola. En el año 2005 el Ayuntamiento y el Ministerio de Defensa llegaron a firmar un convenio para el regreso de dichos terrenos a manos municipales, tras unas conversaciones que se prolongaron durante meses. Entonces incluso se procedió a vaciar de munición y restos de explosivos las cuevas que se ubican en la zona y el trámite en el que más esfuerzo se invirtió fue el de acordar el precio que tendría que abonar el Ayuntamiento por los 700.000 metros cuadrados a recuperar.

El entonces concejal socialista Ignacio García de Quirós fue el encargado de llevar las negociaciones por parte municipal y el convenio pasaba porque el Ayuntamiento abonara el precio estipulado en cuatro anualidades, que iban a contar a partir de los presupuestos de 2006 con una cantidad inicial de 170.000 euros. Estas anualidades, sin embargo, nunca llegaron a abonarse y con la llegada del nuevo equipo de gobierno las conversaciones sobre los terrenos de Denfensa quedaron paradas.

JEREZ

El Ministerio de Defensa aún cuenta en Jerez con el Rancho de la Bola, una importante extensión próxima a la barriada rural de El Portal (en la falda de la Sierra de San Cristóbal) que lleva sin uso militar desde finales de los ochenta. Estas instalaciones fueron creadas en 1947 por la Armada con el objetivo de almacenar los depósitos de explosivos que había en Cádiz.

Desde hace años estas dependencias están sin uso y abandonadas ya que no cuentan, ni siquiera, con vigilancia. Incluso, el Gobierno central culminó el expediente de desafectación de los suelos, aunque sigue manteniendo su titularidad. Días atrás, el Ayuntamiento anunció que el Ministerio de Defensa le ha comunicado que se va a realizar a través del Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED) un informe para acometer los trabajos de limpieza de la zona y aumentar la vigilancia. No obstante, nada se ha avanzado sobre el futuro del depósito de municiones de la zona marítima del Estrecho, nombre oficial que tenía la instalación cuando contaba con uso militar. Semanas atrás, durante la visita del director general de Infraestructuras del Ministerio de Defensa, teniente general Eduardo Zamarripa, a la ciudad se limitó a señalar que la reversión del rancho al municipio aún no está "sobre la mesa".

Sí ha vuelto a propiedad municipal el Depósito de Sementales, unas instalaciones situadas junto al parque González Hontoria, gracias a un protocolo firmado a finales de diciembre. El acuerdo establece que estas dependencias seguirán manteniendo un uso ecuestre pero que pasarán a propiedad municipal.

BARBATE

La localidad barbateña soñaba con que Defensa liberara 20 hectáreas del campo de adiestramiento de El Retín para la construcción de una piscifactoría que generara un centenar de empleos. Incluso se llegó a firmar un preacuerdo en 2010. Pero, a día de hoy, el gozo está en un pozo por las reticencias mostradas por los actuales responsables de este ministerio, al parecer por un supuesto informe negativo al respecto por parte de la Armada. No obstante, las negociaciones siguen adelante, siendo los interlocutores la empresa interesada en el proyecto y el propio Ministerio de Defensa. El Ayuntamiento se ha apartado de esas conversaciones para no convertirse en un obstáculo.

ALGECIRAS

El Ayuntamiento de Algeciras mantiene en estos momentos con Defensa varias negociaciones a fin de poder lograr la cesión o adquisición de determinados edificios, parcelas y terrenos. Se encuentran avanzadas las conversaciones con las que el Consistorio trabaja la cesión definitiva de las instalaciones del acuartelamiento Capitán Velasco que en la actualidad ocupa la Jefatura de la Policía Local. Asimismo, el Ayuntamiento negocia la cesión de otro edificio, el del Gobierno Militar, con intención de habilitar en el inmueble un museo militar. Por otra parte, se busca un acuerdo para alinear los límites de dos parcelas contiguas que ahora se bordean en zigzag. Una es propiedad del ministerio y la otra es la municipal donde se construirá el edificio I+D+I del Campus Tecnológico, en la semicéntrica calle Capitán Ontañón. Por último, el Ayuntamiento también se encuentra interesado en las hectáreas de la zona de Botafuegos de las que Defensa ya ha comunicado que se quiere deshacer.

TARIFA

Tarifa, por su ubicación geoestratégica, atesora un vasto despliegue militar a lo largo de su término municipal que, en los últimos años, ha sido sometido a una importante reducción cuyo máximo exponente se encuentra en las baterías de costa. Sólo quedan operativas baterías costeras en Punta Camarinal y El Bujeo. Y la primera de éstas carece ya de armamento fijo en uso. En su lugar, el Ejército desplaza baterías móviles autopropulsadas desde el acuartelamiento isleño de Camposoto. Así, el Ministerio de Defensa ha dejado de hacer uso de enclaves como Paloma Alta, Paloma Baja, Palmera y Cascabel, así como la batería del Camorro. Ninguna está desafectada, si bien el edificio militar del Camorro ha sido cedido a la Fundación Migres para establecer en él un centro de estudios sobre migraciones y el cambio climático. El Ayuntamiento tiene interés en recuperar para uso público la infraestructura de Palmera, a cinco kilómetros del casco urbano y en plena costa. Allí, el Consistorio aspiraba a instalar un centro de formación, si bien la falta de financiación desde la Junta de Andalucía mantiene el proyecto sin avances.

SAN ROQUE

San Roque dispone de varias baterías militares en desuso desde hace años y que el actual equipo de gobierno trata de recuperar para darle un uso social. Este es el caso de la residencia de oficiales y la de suboficiales, ambos edificios ubicados en en el centro de la ciudad, junto a la Alameda Alfonso XI, en la Avenida del Ejército. El alcalde, Juan Carlos Ruiz Boix (PSOE), ha mantenido varios contactos con el departamento de Patrimonio del Ministerio de Defensa con el objetivo de adquirirlos para la ciudad, al menos uno de los edificios. Se trata de una amplia parcela en la que se pretende contruir un hotel u otras actividades sociales como un centro infantil o guardería. El regidor indicó que Defensa no está muy por la labor, a pesar del "escasísimo uso que se le da a un edificio y al otro ninguno".

Por otra parte, el Ayuntamiento también está interesado en otra parcela militar ubicada junto al Faro, en La Alcaidesa. La actividad aquí es inexistente desde hace años. "El objetivo es llegar a un acuerdo con Defensa para que pase a ser del Ayuntamiento y se le pueda dar usos públicos", añadió Ruiz Boix.