Detenido por matar a su pareja y a la hija de ésta en Sotogrande
Doble crimen en San Roque
La Guardia Civil localiza al supuesto autor vagando por la urbanización con heridas en el cuello. Tanto las víctimas, de 51 y 9 años, como el arrestado son de origen belga y vivían de alquiler
La Guardia Civil detuvo ayer a un hombre de unos 60 años y nacionalidad belga como supuesto autor de la muerte de su pareja sentimental y de la hija de ésta (de 51 y nueve años, respectivamente, y también de origen belga) en un chalé de Sotogrande, en San Roque. Aunque la investigación de la Guardia Civil continúa abierta y bajo secreto de sumario, fuentes de la Comandancia de Algeciras confirmaron a Europa Sur que la principal línea de trabajo se asienta en un episodio de violencia machista.
Las víctimas del doble crimen fueron halladas a primera hora de la mañana -en torno a las nueve- por el propietario del chalé, situado en el número 11 de la calle Daimiel de la urbanización de lujo. Tanto el supuesto autor de los hechos como sus víctimas vivían de alquiler en la casa desde hacía varias semanas y justo ayer miércoles concluía el periodo de arrendamiento. El propietario, al no recibir las llaves ni tener noticias de sus inquilinos, se personó en la vivienda y halló los cuerpos sin vida de la mujer y la niña.
Según la información recopilada por este periódico, la mujer habría sido degollada con un arma blanca (posiblemente, un cuchillo) y la niña asfixiada con un cable o una cuerda. No trascendieron detalles de cuándo se produjo el crimen, si bien varias fuentes apuntan a que pudo ser durante la noche del martes.
Tras el hallazgo y el aviso a las autoridades, el hombre fue encontrado por la Guardia Civil poco antes de las 11:30 de la mañana. Deambulaba por la urbanización y presentaba varias heridas incisas en el cuello, presumiblemente producidas durante el forcejeo con la mujer. Fue detenido y trasladado al centro de salud de Guadiaro, donde recibió asistencia sanitaria. Desde allí, quedó arrestado en los calabozos de la Comandancia de Algeciras a la espera de su paso a disposición judicial, lo que podría suceder hoy o mañana, según la evolución de la investigación.
Los agentes de la unidad orgánica de la Policía Judicial permanecieron el chalé hasta las 13:30 tomando indicios, si bien el levantamiento judicial de los cadáveres no se produjo en ese momento ya que también se desplazó hasta Sotogrande un equipo de apoyo desde Madrid con más instrumental para la toma de muestras y huellas.
La calle se mantuvo acordonada hasta primera hora de la tarde, cuando se retiró el primer equipo de investigación, momento en el que una pareja del Instituto Armado se quedó custodiando el acceso a la vivienda precintada a la espera de la unidad de apoyo y del levantamiento de los cadáveres. La labor de los agentes se centró en la toma de huellas y fotografías. También inspeccionaron los alrededores de la casa, los cubos de la basura y el alcantarillado en busca -presumiblemente- del arma empleada para el crimen.
La vivienda es un chalé de dos plantas con garaje sobre rasante y de tamaño medio -para las dimensiones habituales de las fincas en la urbanización de lujo- protegida con una cancela, sistema de alarma y un muro y cañizo con una altura total aproximada de tres metros.
Durante el tiempo en el que se produjo la toma de indicios pocas personas pasaron por el lugar ya que la calle Daimiel, como muchas otras de la urbanización sanroqueña, es una vía secundaria y además no tiene salida puesto que desemboca en una zona arbolada cercana al cauce del arroyo Guadalquitón. El número 11 se levanta a la mitad de la calle, flanqueada por otra vivienda unifamiliar y el carril de acceso a otro chalé situado en segunda línea.
En contraposición al trajín de los agentes, prácticamente nadie pasó por el lugar. En las calles aledañas, la situación continuó como una mañana más en Sotogrande: viviendas cerradas, jardineros en las calles cortando el césped y una obra como únicos ruidos en la tranquila zona residencial.
1 Comentario