"La Diputación necesitaba subir el techo de gasto a unos límites razonables"

"Al hablar de plan económico financiero parece que estamos hablando de un plan de ajuste y de algo malo para una entidad pero nosotros no tenemos que llevar a cabo ninguna medida", explicaba el diputado responsable del Área de Servicio Económicos de la Diputación, Jesús Solís. Y es que por primera vez desde que entrara en vigor la Ley de Estabilidad Presupuestaria, en 2012, la Diputación tendrá que presentar un plan económico financiero al Ministerio de Hacienda al haber sobrepasado en 2015 el techo de gasto estimado para la institución. Es decir, la Diputación gastó más de lo que según esta ley debía gastarse.

Solís aseguró sin embargo a este medio que el plan que están elaborando, y que pasará por pleno, no llevará consigo ninguna medida extraordinaria ya que es un "mero trámite". De hecho calificó de "ridículo" o "contrasentido" que una "entidad saneada" como la institución provincial deba presentar este documento "por la maldad de la regla del gasto" de esta normativa puesta en marcha por el Gobierno central.

El diputado explicó que el incumplimiento se debe a una bajada del techo de gasto en 2014 , con el gobierno provincial del PP, y que "la Diputación necesitaba situarlo en unos límites razonables", con lo que se podría decir que se ha hecho "casi a conciencia". "Me parece incompresible que con las necesidades que tiene la provincia no pudiéramos hacer inversiones o programas sociales y no vamos a renunciar a nuestras políticas", aseveró.

En números brutos, el límite del gasto no financiero de 2014 de la institución (que según recoge la ley está condicionado por el del año anterior más un porcentaje que el Gobierno situó en 1,8%) estaba en 172,8 millones. "Pero el gobierno anterior se gastó poco más de 161, once millones menos, descendiendo por tanto el límite para el año siguiente", afirmó. La liquidación de 2015 señaló finalmente el desembolso de 173,9 millones de euros, sobrepasando el límite, pero subiéndolo a su vez para este 2016.

En el plan económico financiero, donde debe dar cuenta del incumplimiento y sus consecuencias así como qué va a llevar a cabo la institución para que no se repita en los dos próximos años, Diputación se comprometerá a no sobrepasarlo, pero para ello aplicarán una medida de retención de crédito, dando órdenes a intervención para que no desembolse por encima de 176 millones. Poco más, según afirmó el diputado del área.

Como ya explicó recientemente, la institución provincial cumple con dos de las tres condiciones que exige la Ley de Estabilidad Presupuestaria tras la liquidación del presupuesto de 2015, estabilidad y deuda pública, pero se desvía del tercero, la regla del gasto, que obliga al diseño de este documento.