Fallece un anciano que fue herido el pasado viernes en un asalto a su casa de Chiclana

La Guardia Civil detuvo el mismo día a dos sospechosos de haber participado en la agresión

F.m./T.r. Cádiz/Chiclana

17 de febrero 2014 - 05:01

Un hombre de unos 92 años de edad falleció ayer en el hospital Puerta del Mar de Cádiz, donde permanecía ingresado desde el pasado viernes tras ser golpeado durante un asalto a su domicilio en Chiclana. Fuentes relacionadas con el caso indicaron ayer que la Guardia Civil, que mantiene silencio sobre este asunto, detuvo el mismo viernes a dos personas como sospechosas de ser las que participaron en la agresión.

Un Juzgado de Chiclana que investiga este caso ha decretado el secreto de las actuaciones, sobre las que no ha sido facilitada información oficial alguna a los medios de comunicación. Hasta tal punto, que ni siquiera ha sido comunicado en qué zona de Chiclana se produjo el incidente que ha provocado la muerte del anciano.

Los datos obtenidos de fuentes no oficiales indican que el hombre fue agredido en su domicilio por dos personas que entraron a robar en la vivienda. Era la madrugada del pasado viernes. El anciano fue trasladado después al hospital Puerta del Mar y quedó allí ingresado.

La detención de dos sospechosos se produjo pronto. El mismo viernes, la Guardia Civil ya había arrestado a los dos supuestos asaltantes que agredieron al anciano en su casa.

Entre el vecindario de Chiclana y de otros municipios de la provincia crece la preocupación ante los robos en viviendas. Oficialmente no hay datos que permitan asegurar que se ha registrado un incremento de asaltos domiciliarios, en viviendas vacías por lo general. Pero los vecinos de zonas rurales no tienen duda alguna de que los robos no son pocos ni van a menos. Perciben justo lo contrario: que cada vez hay más.

La madrugada del pasado miércoles hubo un asalto a una casa situada en la zona de Villanueva del Rosal del término municipal de Puerto Real que muestra hasta qué punto han llegado los ladrones de viviendas. No sólo robaron el motor que usaban los dueños de la casa para sacar agua del pozo y también una mulita para el arado y maquinaria de hostelería industrial. Los ladrones se llevaron los grifos de la cocina, los fregaderos e incluso las ocho ventanas de aluminio de la vivienda.

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