Fedejerez llama al diálogo y alerta de las "gravísimas repercusiones" de una huelga

Fedejerez mostró su confianza en la posibilidad de lograr un acuerdo en la mesa negociadora del XXV Convenio de la Vid, presidida por un ambiente que "contrasta con las noticias sobre el bloqueo negociador y las amenazas de huelga" vertidas por la representación social.

Antes de conocerse la convocatoria de huelga para el día 19, la patronal bodeguera emitió un comunicado en el que mostró su confianza "en la buena fe de la representación sindical y en que no se esté simulando por su parte una disposición al diálogo en la mesa negociadora y orquestando medidas de presión fuera de ella", lo que advierte de que "sería contrario a la buena fe negociadora y tendría gravísimas repercusiones para el proceso negociador".

Fedejerez manifestó en su nota su absoluta sorpresa ante "las noticias sobre un supuesto bloqueo en la negociación del convenio, que parece abocar a una inminente convocatoria de huelga" y por "la imagen, absolutamente distorsionada, que se está dando del proceso".

La patronal recordó que desde el inicio de la negociación en enero se han mantenido trece reuniones en las que las partes han expuesto y debatido sus objetivos y argumentos "en un entorno de diálogo razonado y razonable".

La parte empresarial admite que siendo la antigüedad y el censo de eventuales dos de las cuestiones más complejas y que actualmente están sobre la mesa, "no es menos cierto que Fedejerez ha manifestado de forma clara su compromiso por buscar fórmulas de consenso que, con el esfuerzo de ambas partes, permitan encontrar soluciones asumibles y viables para la continuidad y mejora de las empresas y de las condiciones laborales de los trabajadores".

La patronal negó que su intención sea reducir salarios y suprimir derechos de los trabajadores. Es más, en la nota aseguró que en la última reunión del pasado 30 de septiembre "se abrió la puerta a la posibilidad de mantener el sistema de censos de eventuales siempre que el orden de llamamiento fuera con base en criterios objetivos y no solo por la mera antigüedad".

"Asimismo -prosiguió la nota-, Fedejerez reiteró su ofrecimiento a analizar e incorporar, en su caso, a su propuesta de complemento sustitutivo de los futuros devengos por antigüedad aquellas modificaciones que los representantes de los trabajadores propusieran para conseguir una regulación más acorde con sus preocupaciones".

Fedejerez insistió en esa reunión, concluía la nota, en que su objetivo "no es reducir salarios sino establecer un complemento que permita a los trabajadores obtener mayores ingresos que los que percibirían por los futuros bienios si la empresa mejora sus resultados y adecuarlos en caso de que la empresa esté en situación económica negativa".