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Un vecino de Ubrique ha sido imputado como presunto autor de un delito de incendio forestal. El fuego se produjo el domingo 18 de julio en la zona del 'Retamoso', del municipio ubriqueño, cuando la persona ahora imputada supuestamente había estado desarrollando labores de desbroce de vegetación con maquinaria industrial y al entrar el contacto con el roquedo, hizo saltar la chispa que rápidamente se propagó, alcanzando una extensión de 3,5 hectáreas dentro del Parque Natural de Grazalema, el incendio que más extensión ha quemado en la provincia en lo que va de verano.
Efectivos de la Guardia Civil de Cádiz pertenecientes al equipo de investigación del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) investigaron lo sucedido y han determinado que el vecino, de 52 años, utilizó una maquinaria prohibida, entre otras causas por tratarse de una espacio natural protegido y, además, por la época, verano, de peligro extremo.
Según apuntaron desde la Guardia Civil, las llamas podían haber tenido graves consecuencias para el entorno, así como para los vecinos que pueblan durante los fines de semana la citada zona. Por suerte, fue rápidamente sofocado a pesar del fuerte viento de levante reinante durante dicha jornada, por la pronta actuación de vecinos y los medios de extinción tanto aéreos como terrestres.
Incendios de estas características suceden frecuentemente por negligencias llevadas a cabo por incendiarios, las cuales tienen su origen en las labores de limpieza de zonas forestales por diversos motivos, tales como limpieza de la zona con fines ornamentales, pastoreo o eliminación de malas hierbas. De hecho, los datos que la delegada provincial de Medio Ambiente, Silvia López, manejaba sobre el Plan Infoca arrojaban que la gran mayoría de incendios de la temporada se debía a negligencias o descuidos y, en parte, por estas labores.
La Consejería de Medio Ambiente de la Junta emitió una Orden con carácter permanente por la cual se prohíbe encender cualquier tipo de fuego en el campo hasta el próximo 15 de octubre, incluidas barbacoas, junto con la circulación de vehículos a motor en las zonas forestales. Los delitos de incendios forestales están incluidos en el título de delitos contra la seguridad colectiva y prevén fuertes penas para las personas que provoquen incendios, especialmente con afección a espacios naturales protegidos.
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