Margallo saca de Gibraltar la bandera de España con el cierre del Cervantes
El titular de Exteriores español entierra el último vestigio del foro tripartito a ocho días de reunirse con el titular del Foreign Office
El ministerio de Asuntos Exteriores de España cerrará la sede que el Instituto Cervantes tiene en Gibraltar desde hace casi cuatro años. La medida supone sacar del Peñón los últimos símbolos españoles que quedan en la colonia -el escudo en la puerta y la bandera en el interior- y el entierro definitivo del último vestigio del Acuerdo de Córdoba, que fue la culminación de aquel foro de diálogo tripartito del que el Partido Popular -ahora en el Gobierno y entonces en la oposición- abomina desde el mismo día en que se puso en marcha.
El gabinete que dirige José Manuel García-Margallo comunicó ayer la decisión personal del ministro al director de la delegación gibraltareña, el linense Francisco Oda, de momento sin fecha para que abandone la instalación que en su día cedió el Gobierno gibraltareño cuando ejercía de ministro principal Peter Caruana.
García-Margallo toma esta medida cuando quedan nueve días para que se siente por primera vez con su homólogo británico, Philip Hammond, para hablar del llamado conflicto de la Verja. Una reunión que se celebrará en Madrid y que se entiende que debe servir para dar impulso a las conversaciones ad hoc que ambos países piensan poner en marcha para alcanzar acuerdos sobre problemas concretos de la zona, en las que participarán además el Gobierno de Gibraltar y las administraciones autonómicas y comarcales españolas.
Según publica el diario ABC, el pasado martes, el Consejo de Administración del Cervantes consideró oportuna la clausura de la sede en la colonia británica, una determinación que obedece al plan estratégico de cambios en el mapa de centros y en las nuevas prioridades que se plantea el Instituto, que pasan por la apertura de nuevas instalaciones para la difusión de la lengua y la cultura españolas en otros puntos más importantes. Ahora queda que el cierre sea aprobado por el Consejo de Política Exterior y luego reciba el visto bueno definitivo del Consejo de Ministros. La sede gibraltareña del Instituto Cervantes se puso en marcha el 4 de abril de 2011 sin que acudiera alguna autoridad española a su inauguración. Desde que fue acordada en el marco del foro tripartito puesto en marcha bajo el gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, tanto el Partido Popular en España como el GSLP y los liberales en Gibraltar se mostraron contrarios a su apertura.
Ya el día 19 de septiembre de 2006, tras el acuerdo definitivo en Córdoba el entonces portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui criticó la decisión: "Es un absoluto y completo dislate, ya que estos centros se abren en el extranjero, en países de habla no hispana, lo que supone conceder a Gibraltar que es, de hecho, el extranjero". Los laboristas de, entonces, Joe Bossano, también expresaron su discrepancia, "toda vez que es un organismo del Estado español y como tal puede ondear una bandera española.No apoyamos una medida cuyo objetivo es diluir la influencia británica e incentivar la española. Siempre respaldaremos las relaciones cordiales con España basadas en el respeto mutuo pero nos opondremos a cualquier movimiento que facilite la absorción institucional, cultural, lingüística, económica, social o política del país vecino".
Cuando el entonces ministro de Exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, visitó la Roca en julio de 2009, la apertura del Cervantes se vio como "la primera piedra de la colaboración en materia educativa".
Desde su apertura el Instituto Cervantes ha mantenido un completísimo programa de actividades para acercar a los habitantes del Peñón la cultura española a través de talleres, cursos, recitales, catas y exposiciones (de gastronomía, música, arte, etcétera) que siempre han obtenido una excelente respuesta. En casi cuatro años han pasado por las instalaciones más de cuatro mil alumnos. En los últimos meses el director, Francisco Oda, se había visto obligado a ampliar sus aulas.
64 Comentarios